Pablo Hasél en la cárcel [¿Por qué René, Benito y Jorge no se expresan?]

Justicia Social

(San Juan, 12:00 p.m.) Pablo Hasél está preso.  Inició una condena de nueve meses por injuriar con su lírica de rap a la corona española, la cual se podría extender a cinco años, por varios delitos y acusaciones que pesan contra él.  Es curioso, pero una noticia que es global, pues una vez arrestado, España ha entrado en un caos de ciudades incendiadas, como Barcelona, Valencia y Madrid, mientras Puerto Rico hace silencio.  Es curioso, pero el silencio en Puerto Rico llega al punto que nos demuestra no solo falta de conocimiento, sino más que nada, evadir asumir posiciones contestatarias y en oposición a la lógica del capital y del neoliberalismo.

Pues bien, Pablo Rivadulla Duró, nació el 9 de agosto de 1988 en Lérida, Cataluña (España).  Es hijo de empresario, muchacho educado, que ha asumido una línea claramente anticapitalista a partir de su lectura de Marx, su solidaridad con Cuba, y su reconocimiento al Ché Guevara. Es un sujeto extraño en el contexto cultural de Puerto Rico, donde Benito Martínez, mejor conocido por Bad Bunny, ha concentrado su trabajo en reflexionar a partir de actos y eventos de la vida diaria, pero sin cuestionar las formas en que el capital y el mercado asumen al organizar la música, comercial y globalizada.   ¿Alguien criticó que cerrara un puente para mostrarnos un auto de $3 millones de dólares? ¿A quién le interesa la opulencia de Bad Bunny, Anuel AA o Rafy Pina?

Pero Jorge Pabón, mejor conocido por el Molusco, amigo y compadre de Sixto Jorge Díaz Colón, hoy acusado por el gobierno federal de extorsionar, [Molusco] no ha dicho nada de Pablo Hasél. No así como el verano del 2019, cuando Molusco convocaba a expresarnos contra el gobernador Ricardo Rosselló, mientras su amigo y compadre, extorsionaba por $300 mil dólares con tal de “apagar” la protesta.  ¿Pero dónde están René Pérez, Enrique Martín, y el propio Benito Martínez, o es que no se han enterado de la acusación y del pedido de Sixto Jorge a Molusco para organizar la protesta?

Finalmente, uno desea saber si René Pérez o los artistas de la escena del rap boricua, como Mala Cara, 79 o Intifada, o vaya, Vico C o Ivy Queen, tienen algo que decir en solidaridad con Pablo Hasél.  Todos ellos,  que han vinculado lo social con su lírica, no es posible que vean que el encarcelar a una persona por hacer un acto de libertad de expresión, les afecta también a ellos, los artistas urbanos clásicos. Pero nadie escucha comentario alguno, por las redes sociales a favor de Hasél.

Entonces, algo me hace pensar, que el capital corporativo de Universal, Sony o para todos los fines, la Mega, no permiten que la lírica cuestione las formas de acumulación del capital, y menos aún las lógicas neoliberales.  De mi parte, apoyo total al artista urbano español Pablo Hasél.  Su libertad inmediata.  Pensemos.