Los nuevos terroristas [criminalización de la protesta] en los EE.UU. [¿y en Puerto Rico?]

Política

(San Juan, 1:00 p.m.)  Ayer hubo una advertencia de “ataque” al Congreso federal.  Bajo dicha advertencia, la Cámara de Representantes pospuso sus trabajos, no así el Senado federal.  Según las fuentes de inteligencia de los EE.UU., grupos “extremistas de derecha” habrían de hacer otra intentona.  ¿La razón? Que según la historia constitucional de los EE.UU. el 4 de marzo es el día que el presidente asumía la presidencia. 

Es un dato, pero a partir del pasado 6 de enero, y el acto de insurrección en los EE.UU., promovido por distintos grupos entre otros los Proud Boys, el gobierno de dicho país, por primera vez ha reconocido un enemigo interno: el terrorismo de la ultra derecha.  Por mucho tiempo habían rehusado llamarle terrorista a un acto de oposición en dicho país.  Pero ya se cruzó la línea de Rubicón, y todos los que están en el poder, claman que los otros, si se oponen a ellos, son terroristas.

En las vistas congresionales sobre los incidentes del 6 de enero, el director del FBI, Chris Wray., advirtió que el terrorismo de extrema derecha y racista, ha repuntado en los EE.UU. en tiempos recientes.  Ahora estos investigan a muchos grupos que desean “tomar el poder” cueste lo que cueste.  Lo interesante, es que los informes de su agencia, luego de los sucesos de enero, apuntaban en la misma dirección a los grupos de izquierda, izquierda libertaria y contestario. Es decir, ellos hablan de grupos extremistas.

Lo que está en juego en los EE.UU., que salpica sin lugar a dudas a Puerto Rico, es la  problematización de la protesta social.  En otras palabras, los eventos diarios en la ciudad de Portland, Oregón, donde grupos de izquierda y anarquistas  atentan contra el poder del estado, son próximos a ser clasificados como terroristas.  Esto ya fue advertido desde enero por el propio FBI, y sobre todo que en las vistas en el Congreso, el propio director Wray indicó que algunos de los activistas de derecha, eran realmente hablando gente del grupo Black Lives Matter que los habían infiltrado ese día.

En fin, que la lucha social ha de continuar. No obstante, se avecinan días difíciles para la protesta. Pensemos.