En la burbuja del estadio José Antonio Huelga, los Alazanes del mentor Carlos Martí tuvieron como figura preponderante a su bateador zurdo y designado Guillermo García, quien se fue de 5-4, incluidos par de jonrones, seis carreras impulsadas y dos anotadas.
El mentor Martí había aseverado, tras el segundo partido del match, que García por su inexperiencia en postemporadas –apenas tiene 20 años-, no estaría en la alineación frente a lanzadores zurdos como el experimentado Yoanni Yera.
Pero hoy, bendecido por la feroz fuerza conque García le pega a la Teammate, ya ha cambiado de opinión. Mañana, en el quinto juego de esta final, si será regular, precisamente contra Yera, anunciado por el mentor Armando Ferrer para escalar al montículo.
Este festival de batazos granmenses también incluyó al intermedista y capitán del equipo Carlos Benítez, que conectó de 3-3, recibió dos boletos y remolcó cuatro carreras.
Como cuarto bate de los Alazanes tengo la responsabilidad de sustituir a Alfredo Despaigne y hasta hoy, tuve un punto de contacto con la pelota muy adelante. Pero en este juego esperé a que la bola llegara y pude salir del mal momento ofensivo, explicó Benítez.
El partido, muy alejado de los cánones de una final beisbolera, se fue de un solo lado desde el segundo inning, en que los Alazanes marcaron racimo de cinco carreras frente a las ofertas del abridor Renner Rivero –había abierto ayer y también explotó temprano-, y del primer relevista Joel Suárez.
Y para poner el juego a punto de nocaut, pisaron el home en seis ocasiones en el séptimo inning, después de 1:22 horas de un partido detenido por lluvia.
Las palmas por los Alazanes para el lanzador Yoel Mojena quien, con sus lanzamientos por dos ángulos diferentes, tiró seis entradas a ritmo de cuatro jits e igual cantidad de ponches y boletos.
Con el match favorable 3-1 a los granmenses, mañana abrirá Yoanni Yera por los Cocodrilos y Lázaro Blanco, invicto en cinco juegos en esta postemporada, irá a la lomita por los Alazanes.