Mangrove o la lucha por los derechos civiles en Notting Hill

Cine caribe

A André y Barbara Shervington

Cuando llegué a Londres, a vivir y a estudiar en el 1986, lo hice cargando a cuesta un bulto tipo gusano, color verde. En ese iba todo mi capital: unos pantalones, un traje de vestir formal, y varios pares de zapatos.  Cuando me fui de Londres, cinco años despues, no llevaba a cuesta ningún bulto, solo mis memorias.  En Londres conocí el mundo, pero en particular conocí a este inmenso Caribe, compuesto de una infinidad de tierras-naciones, las cuales expandieron mi mirada de esta región.  Todas somos islas.  Todas somos islas repletas de gente extraordinaria.

En mi devenir en Londres, por razones dentro de mi voluntad, mi primer pedido fue conocer a los caribeños que convivían en Notting Hill.  No sé cómo, pero mi primer amigo caribeño en Londres fue André Shervington, un afrodescendiente original de Guayana, quien había migrado al Reino Unido en la década de 1940, para pelear en contra del nazismo.  Luego se casó con Barbara, con quien procrearon dos hijos. La familia Shervington, caribeños, negros, rastas y sobre todo nacionalistas, me mostraron el mundo de Londres desde otra perspectiva.  A ellos les he rendido mi cariño y  admiración en más de una ocasión, por escrito y de forma visual.

Lo importante de este cuento, no es la comida sabrosa con pique que se comía en la casa de ellos, sino la vinculación de André Shervington con la comunidad caribeña de Notting Hill. En esa comunidad él fue uno de los primeros líderes que articuló la idea de un carnaval para presagiar y preservar el legado de sus orígenes.  Notting Hill sabe a Caribe. 

Pero, no vine a contar una historia de mi vida. Vine a contar la historia de Mangrove (Dir. Steve McQueen, 2020). Ya sabemos que Sir Steve McQueen, nacido en Londres en el 1969, de origen Granadino y Trinideño, se ha consagrado como uno de los directores de cine más importantes de Inglaterra.  Ostenta el título de nobleza de Sir (Caballero) el cual es un reconocimiento de suma importancia para un hombre evidentemente afrodescendiente.   Pero su gran obra al día de hoy sigue siendo 12 years slave (Dir. Steve McQueen, EE.UU., 2013), por la cual ganó el Oscar de mejor película, mejor guion adaptado y mejor actriz de reparto.

Con ese pasado-memoria, McQueen dirige la serie Small Axe, que se compone de cinco películas sobre la lucha social por la igualdad racial en Inglaterra.  La primera de la serie es Mangrove, la cual él dirigió y es co-autor del guion.

En esta película se cuenta la historia de Frank Crichlow (Shaun Parkes) quien en el histórico barrio de Notting Hill, cuando todos y todas eran negros, vivían en una comunidad en la cual no se sentían representados.  Ahí Crichlow/Parkes pensó en abrir un restaurante. Uno para comer comida de origen caribeño. 

La historia nos cuenta, nuevo para mí también a pesar de mis cinco años de residente en Londres, cómo la policía los reprimió por el sólo acto de expresar su cultura.  El resto, es una mirada transoceánica de las luchas sociales en Londres por los derechos civiles de la población afrobritánica. En esta medida, la película es una mirada no norteamericana sobre la lucha por los derechos civiles de los afrodescendientes.

Es un gran trabajo, reconociendo que se hizo con presupuesto limitado dirigido a la televisión. No obstante, McQueen, junto a un elenco de primera, incluyendo a la guyanesa Letitia Wright en el papel de Altheia Jones, activista que vincula a los negros británicos con el movimiento de los Black Panthers de los EE.UU.

En fin que se debe ver. A mi me motivó a recordar mis días de Londres. Sobre todo a la solidaridad ofrecida para conmigo por personas como André y Barbara Shervington. Para ellos y para su legado en la tierra, Aché, mucho Aché. Bendiciones.

Vean la película. Vean la serie Small Axe.