La vi hace unos días. No la he querido comentar, pues creo que es una joya de película que confunde otros asuntos, y nos deja a todos maltrechos y maltrechas, pero es una joya de película. No por eso, no puedo hablar de la misma. Usted, ¿qué está mirando?, como diría Residente en La Perla, debe irla a ver. Dale que se acaba el tiempo.
Nomadland (Dir. Chloé Zhao, EE.UU, 2020), es una película importante que versa sobre el desplazamiento humano al cierre de una fabrica de losa-piedra, en un lugar remoto de los EE.UU. Uno se inserta en la conversación y la siente y la padece, como si fuera uno mismo, pero es una película en la cual la directora de cine chino-americana, Chloé Zhao, nos cuenta la forma en que la gente se reinventa y lucha de forma resiliente, por no sucumbir. Importante recordar que Nomadland se llevó el Oscar de mejor película y mejor directora de cine, para el 2020.
Bajo una actuación magistral de Frances McDormand (Fern) la cual le consagró un segundo Oscar a mejor actriz, el segundo en menos de cinco años, la historia no sólo es bien contada, sino que le contagia a uno la vibra de ser anti-imperialista y anti-neoliberal. En su primer Oscar, en la película Three bilboards Outside Ebbing (Dir. Martin McDonagh, EE.UU., 2017), ella lucha por la justicia, por reconocer quién mató a su hija. En este segundo Oscar, ella lucha porque las voces invisibles y silenciadas por el capital y las políticas neoliberales, sean escuchadas.
Es una película magistral donde Zhao, en lo que ya es su estilo de cine, incluye personajes y actores que no son parte de un libreto. Son simplemente gente de la vida real que quieren contar su historia. Este es el caso Bob Wells (Bob en el filme) quien es un lider del minimalismo y anti capitalismo en los EE.UU. Por lo tanto, la película narra su historia y de esos que le siguen en un peregrinaje nómada en contra del capital.
La película tiene una interesante resonancia con Up in the sky (Dir. Jason Reimtan, EE.UU., 2009), en la cual también se asume una línea anti el neoliberalismo. En esa medida vale la pena ver Nomadland, y celebrar el trabajo extraordinario que en narrativa hace la directora Chloé Zhao.
De mi parte más allá de llorar por el dolor y la alegría de estar vivos y poder luchar, pienso que hoy por hoy France McDormand nos ha demostrado que se puede hacer cine comprometido y hacerlo de calidad. A ella y a la vida personal que ha asumido (madre adoptante de un hijo latinoamericano, y casada con uno de los hermanos Coen, Joel). En fin, que soy fan de ella por su compromiso actuarial. Adelante, Francés, adelante.