Miembros de la comunidad de colombianos que residen en República Dominicana alzaron su voz para pedir que haya sentido de solidaridad, rápidos consensos y compromiso entre todos los actores políticos de la región para lograr que millones de personas no sigan profundizando su situación de pobreza y desconsuelo, debido a los bloqueos, violencias y saqueos a que se ha sometido a Colombia.
El grupo denominado “Colombianos por la Paz, no bloqueos, no vandalismos”, expresa que las marchas provocadas por la propuesta de reforma fiscal del gobierno de Iván Duque “han sido aprovechadas por grupos internos opositores del gobierno y la mano de terceros en la región que tienen intereses políticos y económicos para desestabilizar”.
Expresan que “los protestantes han vandalizado bienes públicos y privados, hicieron y mantienen bloqueos en vías dentro y fuera de las ciudades, los ataques a los sistemas de transporte público, negocios particulares, bloqueos de vías y cierre al acceso de alimentos, medicinas y oxígeno para atender los enfermos de Covid-19, suministro de gasolina y servicios elementales como la recolección de basuras, han sido afectados seriamente” por estas movilizaciones.
En un comunicado de prensa servido a los medios locales, el movimiento asegura que estas manifestaciones también han sido aprovechadas por otros grupos con intereses particulares, como dueños de taxis y camiones, estudiantes y profesores entre otros, para presionar por el cumplimiento de acuerdos previamente firmados, así como sindicatos y centrales obreras que también han cerrado filas alrededor de esas jornadas.
El sur occidente de Colombia y especialmente Cali, ha sido la ciudad más afectada por esta situación, ya que también han bloqueado y paralizado toda la actividad productiva de la región, agregando la movilización de cientos de indígenas del sur del país hacia Cali, que es la tercera ciudad del país en población concentrada.
Con el retiro de la reforma planteada por el gobierno de Duque, el 2 de mayo, se esperaba que las aguas se calmaran, hecho que no se dio, dado que han continuado las marchas, los bloqueos a la población civil, y los ataques a los bienes públicos y privados.
El gobierno se ha reunido con la sociedad civil, los empresarios, los partidos políticos y bancadas del Congreso a fin de lograr apoyo y consenso, y poder sacar de la crisis a la democracia más antigua del continente.
El grupo de “Colombianos por la Paz” expresa que Duque ha insistido en dialogar y negociar, sin tener aún respuesta positiva para desbloquear y avanzar en la recuperación de la dinámica social y empresarial del país suramericano.
“Todos esperamos que haya sentido de solidaridad, rápidos consensos y compromiso de país entre todos los actores para lograr que millones de personas no sigan profundizando su situación de pobreza y desconsuelo”, expresa el comunicado.
Han muerto 42 personas y cientos resultaron heridas durante las protestas antigubernamentales que dieron inicio hace dos semanas en medio del descontento avivado por la creciente pobreza y desigualdad en el país durante la pandemia, dijo el martes la Defensoría del Pueblo de Colombia.
La institución gubernamental de derechos humanos señaló que se ha reportado la desaparición de 168 personas durante las movilizaciones, que continuarán el miércoles. El cinco de mayo, la defensoría afirmó que 24 personas habían muerto durante las manifestaciones y 89 estaban desaparecidas.