La cultura de los pobres

Cultura

Platicaba hoy con unos pescadores quienes me daban un recorrido por una costa del sur de Puerto Rico y me explicaban como los “ricos” se habían adueñando de su playa y de los accesos a la misma. Ellos, los pescadores, me contaban como aún quedaban playas y accesos de los “pobres”. Era curioso, pues estos pescadores articulaban la idea de cómo las clases sociales habían estratificado el acceso a su único sustento: el mar.

En un país donde en apariencia todo se ha venido a menos, es interesante como la cultura popular ha logrado expresar las diferencias que las clases sociales ejercen hoy en el país. En esta medida lo interesante es como se han ido popularizando los términos de las clases sociales y la gente, sobre todo los pobres y marginados, logran articular como parte de su protesta social silente un discurso que es culturalmente hablando, subversivo.

No sé quien es responsable, pero siento que la cultura nacional ha comenzado a cambiar, lentamente, pero va cambiando. Que más y más existente voces que expresan los relatos de las grandes teorías, y logran promover una visión diferenciada de la vida. En esta medida, la cultura va cambiando, cuando nuestros diálogos de vida diaria, también van cambiando. Los cambios de paradigma en este sentido, no requieren de grandes revoluciones. Requieren que cambiemos el lenguaje, que logremos expresar las cosas como son, y no como deberían ser. Es decir, “al vino vino, y al pan pan”.

Hoy fueron unos pescadores. Espero que mañana sean unos obreros de construcción. Luego serán unos maestros, y así sucesivamente. A lo mejor logramos cambiar la cultura del país. Cuando eso ocurra, apuesto, que habremos cambiado la forma en que se conduce el gobierno y la sociedad.