COVID 19

Caribe Imaginado

Galilea ínfima en movimiento

constante adentro de la mirada

daba vueltas tratando de encontrar no sé qué

muy hacendosa en el todo blanco

limpio como una caja de pietri.

En ese cielo nocturno los planetas eran

un abrir y cerrar de ojos de cometas

el frío, el dolor, el frío y la cola de sangre

demasiada

Relájate, aquí voy

Y cada vez más sangre colada

para el estancamiento de la ciencia

Hoy no tengo antebrazos

Duelen las palmas de las manos

Un colador tiene menos hoyos que yo

Ese prado noche inmenso solo tenía una luz

La cordura, la locura, el alma queriendo salir de paseo

al congelador de las muestras

Y en algún momento me preguntaron

El nombre, mi nombre y quise reírme como un loro

porque finalmente a alguien le importaba

el experimento que estaba en la cama petrificada.

No confío en la ciencia de la soledad: nadie debe dejar a los suyos.

Nadie debe dejar a los suyos, nadie debe dejar a los suyos

en la aséptica blancura de un siniestro

viaje deshumanizado.

Dormir duele, pensar en cerrar los ojos como almejas también.

Y luego despiertan los años sin comer nada.

Ya no hay barcaza fría que respire porque no hay.

Y YO SOLO QUIERO VIVIR.