(San Juan, 11:00 a.m.) Brindo por una mujer ráfaga que levita cuando salta,
Por un zumbido de piernas que veloces, celajes desata,
Por la ingeniería del músculo que cabalga salvaje, los desafíos y las vallas,
Por el bólido de unas zapatillas de correr
que pestañea y silva a 100 metros de distancia
por ella más cercana,
Brindo por las lágrimas de la vencedora
parecidas a preseas y medalla,
Por la flor que de orgullo a raza
diadema y resiste, embiste y soberana,
Por el destello de su mirada de fruta y Antillas
con que alumbra y cordillera a toda costa
nuestra costa del alma,
Porque venida al mundo de más lejos que la fría luna
reclama Boricua
¡linaje, poesía, resplandor y orbita!
Porque Juan Antonio Corretjer
el poeta canción que por Jazmín hoy canta
no cabe en su muerte con su río rebelde
abolengo, propicie, sustancia y torrente,
Brindo, porque su sonrisa enarbola el podio de la esperanza
venciendo a la traición jaiba
que osa representar a otra nación invasora que niega la casta
escondiendo su oriundez de tradición y de Isla que insulta
por sus vergüenzas ajenas tan tristes, insulsas y suyas.
Brindo por su valentía de espíritu y su cría,
Por la Mujer de Oro, La Negra que Somos,
y la Borinqueña que siempre Seremos contra todos los vaticinios,
Por Jazmín Camacho Quinn,
la olímpica y perpetua que flamea contracorriente,
la que regresa a su Borinkén
con inmensidad de laureles y orgullo campante
para volver a nacer donde siempre había nacido
por la estirpe, la plenitud,
el corazón. la patria y la Vida….