Entre Piedra de Luna de Richard Rivera-Cardona

Crítica literaria
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[Nota del Autor: Esta breve reseña nace de una conversación con el autor y con el Profesor Jonathan Montalvo para el Pen Internacional de Puerto Rico sobre el personaje trans en la literatura puertorriqueña: https://www.facebook.com/miguelangel.lugomarcano.5/videos/342073824309831]

El género ha sido siempre fluido como una construcción social y cultural. El transgénero, por su parte,es un término global que define a personas cuya identidad de género, expresión de género o conducta no se ajusta a aquella generalmente asociada con el sexo que se les asignó al nacer. Incluye las distintas maneras en que las identidades de género de las personas pueden diferir de su sexo” (www.plannedparenthood.org/es/temas-de-salud/identidad-de-genero/trans-e-identidades-de-genero-no-conforme).  Algunos textos en la literatura puertorriqueña que exploran estas identidades alternas (llamadas también periféricas por Foucault en su momento) son: las novelas Sirena Selena vestida de pena(2000), de Mayra Santos-Febres, Conversaciones con Aurelia (2007), de Daniel Torres, y los cuentos “Gluglú “ (2016), de Max Chárriez y “Changó” (2017), de Yolanda Arroyo Pizarro, entre otros. Piedra de Luna (2020), de Richard Rivera-Cardona, narrada en segunda persona, se inserta en este continuum y lo moderniza incorporando el tráfico sexual a través del internet: “Soy Piedra de Luna. Pruébame si te atreves. Transgénero. Versátil. Bien dotada” (20). Así va a dar con ella Martín Class, escritor, quien al final del discurso narrativo es “leído” por su personaje, y por nosotros, hasta asistir a una transformación total y un nacimiento esencial

Las conversaciones que mantienen estos dos personajes, Martín y Piedra de Luna, los van acercando a su propia humanidad.  El saco de los prejuicios de uno y otro se va desgarrando hasta que Martín asiste a la revelación travesti del transgénero, cuando como mariposa que deja su capullo, el personaje principal logra realizarse en un escenario. Pero antes leemos acerca de la sordidez de su vida prostituida para sobrevivir en la calle y las anécdotas de esa familia de dragas que constituyen los personajes de Piedra de Luna, Ninoshka, y Alondra, en un acto de solidaridad, para poder sobrevivir en una urbe llamada San Juan.  Uno de los mejores momentos de este libro es cuando se intercala la historia de amor de la protagonista y los poemas que le escribe a su amado se reproducen a lo largo del mismo discurso narrativo: “y antes cuando estuve rendida/tantas veces/me salvaste/amorosamente/con la fuerza extraña de un hombre cobarde” (62).

El joven escritor y comunicador Richard Rivera-Cardona, galardonado con una

Mención de Honor en los International Latino Book Awards, bajo la categoría Best Collection of Short Stories 2019, por su libro de cuentos Salto al vacío (2018), ha sabido investigar y confeccionar una narración con todas las claves necesarias para acercarse a lo transgénero desde la distancia prudente de su alter-ego Martín Class, hasta quedar atrapado en las redes de su personaje central y sus entrevistas.

Uno de los aspectos más significativos de esta obra que aquí nos ocupa es también su calidad transgenérica: narrativa, poesía, entrevista, teatro o espectáculo travesti, comunicado de prensa, etc. En muchos sentidos le toma el pulso a la situación de la comunidad transgénero en la Isla y lo hace a su vez en un modo metaliterario porque es una narración acerca del acto de narrar, donde el entrevistador se hace entrevistado, y el discurso pasa de ser de uno que narra a ser narrado.  Martín, el escritor, es entrevistado por Piedra de Luna, y pierde el control de la narrativa porque la voz de ella lo impregna todo.

La “patería encendida”, la falta de solidaridad de la misma comunidad LGBTTQI+, la venganza de Stonewall, la primera marcha gay en Nueva York, la Parada de Boquerón en Puerto Rico; toda una gama de historias se cuentan y recuentan en esta novela en la que el narrador es entrevistado por su personaje en la larga tradición que va desde La lozana andaluza, de Francisco Delicado, Niebla, de Miguel de Unamuno, hasta los Seis personajes en busca de autor, de Luigi Pirandello. Piedra de Luna es una obra que nos mueve el piso de los prejuicios hasta dejarnos a la intemperie de las emociones.