(San Juan, 1:00 p.m.) Luego de cinco años de persecución politica y radicación de cargos criminales falso, el pasado presidente de la Universidad de Puerto Rico (UPR) Uroyoan Walker Ramos, y el pasado rector del Recinto de Rio Piedras, Carlos Severino Valdez, fueron declarado en el día de hoy no culpables, de los cargos que se les imputaban. Con templo de paz, mucha dignidad y sobre todo la verticalidad que indica que nunca dudaron de su inocencia, ambos acusados salieron con la frente en alto de Centro Judicial de San Juan.
Hoy, no obstante queda completamente maltrecho el abogado y comentarista radial, Carlos Díaz Olivo, quien fue la persona que orquestó todo el caso, por motivos aún desconocidos. Una posibilidad puede ser, su estado de animosidad personal contra el pasado presidente del sistema UPR y también profesor de derecho, Antonio García padilla. Aunque otra razón de peso puede ser el ánimo racista y clasista de Díaz Olivo que no permite que gente humilde como Walker Ramos y Severino Valdez, lleguen al poder.
Este caso, el cual sentó un precedente inhumano para los acusados y desastroso para el sistema UPR, la teoría de la Oficina del Fiscal Especial Independiente, fue ampliamente derrotada. A partir de un chisme que Díaz Olivo, WKAQ y miembros de una facción del Partido Nuevo Progresista promovieron entre 2015 y 2016, que es la razón por la cual se llevó este caso.
Existen testimonios de por lo menos cinco miembros de la Junta de Gobierno de la UPR, que indicaron que votaron por el despido de los funcionarios públicos por el temor que les causaba el micrófono que Díaz Olivo controlaba en WKAQ. Ese micrófono se usó de su parte para intimidar a los miembros de la junta y manipular sus decisiones.
La forma de amedrentar de Díaz Olivo es lo que colapso. Es una forma que ya le ha causado problemas, como el regaño que le diera en el 2109, el Tribunal Supremo. Estose dio en el caso de In re Carlos Díaz Olivo, 2019 TSPR 205.
Ahora, superada la persecución que comandó por cinco años Carlos Díaz Olivo, le deseamos a los hoy hombres libres, Uroyoan Walker Ramos y Carlos Severino Valdez, que sal a celebrar su libertad. ¡No más persecución política en Puerto Rico! 