Cuando la ley es puro entretenimiento

Justicia Social

(San Juan, 1:00 p.m.) Ha llegado un punto, que la prensa comercial entrecruza lo que es la noticia, como un evento y hecho fáctico, con pauta y entretenimiento. Ante este cuadro, ya uno ni sabe cuando la noticia es genuina, y cuando la misma es patrocinada por un “inversionista” asistido por una persona que se dedica a las relaciones públicas.

Para muestra muchos botones: ¿Cuál es la noticia en la noche del concierto de Bad Bunny?  La respuesta, pues claro, Bad Bunny.  Pero, ¿alguien debió haber previsto que dicho concierto nos iba a afectar, dramáticamente, todas las navidades? Criticarlo, o detener el concierto o regularlo, no era posible. La noticia como entretenimiento era más importante.

Luego del concierto de Bad Bunny, noticias provenientes de él o sus manejadores ya no existen. Existen ahora las quejas que un nutrido grupo de boomers, es decir personas nacidas entre la década de 1950 y 1960, están planteando.  Por lo que, Bad Bunny ya no genera noticias, y las noticias duras, a partir de los infectados en su concierto, no son discutidos en primera plana como se hizo por siete días antes de sus conciertos.

De igual forma, en el caso del productor de música urbana, Raphy Pina, es curioso que una vez hallado convicto, este ha desaparecido como evento noticioso.  Pero durante los días con antelación al juicio y durante el juicio, la relación entre la fama, sus amistades y sus posesiones, fue la noticia.  Luego, ya no hay noticia, salvo la mirada desde los credos de fe, que un grupo de boomers, nuevamente, hace sobre el ahora convicto productor y el “bien y el mal”.

En fin, que Puerto Rico cierra el año en crisis política (por la corrupción), económica (para los sectores asalariados y pensionados), pero el entretenimiento es la noticia.  Sin más. Pensemos.