Sweet Girl o integrando a las mujeres en la lógica de los sicarios

Cine caribe

No es un tema nuevo, pero de un tiempo para acá, cada vez más, Hollywood, o lo que queda de esta geografía fílmica, se dedica a compartirnos que los hombres son sicarios, pero que las mujeres [en igualdad] también lo pueden ser. Realmente, humildemente hablando, no entendieron el punto.  El manejo de la muerte del otro, es una construcción continua de la masculinidad. La mujer, por el contrario, y puesto desde distintas formas en los múltiples feminismos, no lo plantea así. Pero, Hollywood es una fórmula de consumo.

Sweet Girl (Dir. Brian Andrew Mendoza, EE.UU., 2021) es una película sencilla, sin grandes pretensiones, integrando artistas de otras dimensiones actuariales, que reproduce una lógica femenina en la actuación de una joven artista.  Rachel Cooper (Isabela Merced) decide, en un viaje de falta de lucidez mental un tanto esquizofrénico, crea una realidad paralela y decide vengarse de toda persona que participó de forma directa o indirecta en la muerte de su madre por falta de fármacos, o en la de su padre por asesinato.

Por lo que la película transita luego de la muerte de la madre en un diálogo real o no entre el padre, Ray Cooper (Jason Momoa) y la hija, Rachel/Isabela, quienes se van vengando de todos los que permitieron a la madre morir. Nada, un papelón, pues se justifica los más brutales niveles de violencia por parte de la joven Rachel/Isabela, pretendiendo que usted aplaude, porque ella está “haciendo justicia”.  Absurdo.

Mujeres sicarias ya hay varias películas. Destaco solo dos. Pienso en The brave one (Dir. Neil Simon, EE.UU., 2007) con Judy Foster; y por otro lado Peppermint (Dir. Pierre Morel, EE.UU., 2018) con Jennifer Garner. Ambas son mujeres sicarias, que por alguna razón se comportan como hombres/cultura del patriarcado y deciden hacer justicia por lo suyos matando a toda persona que les causó daño. ¿En serio?

En fin, que Sweet Girl es una película del montón, que le ha gustado a mucha gente, y ante la falta de entretenimiento “para toda la familia”, que mejor que ver a una mujer asesinar a por lo menos seis personas.  Y lo mejor es que luego se sale con la suya y se va a vivir, libre y sin dilemas, a las “repúblicas” de América Latina.  Un filme basado en prejuicios sobre prejuicios. A su discreción la ve.