Hoy es primero de mayo y el día está nublado. Esa condición atmosférica podría ser un reflejo de la situación del país y todos sus tonos grises. Sin embargo, voy a pensar en que recibir las primeras lluvias de mayo son una bendición. Y en el folclor popular, se supone que, si nos bañamos en ellas, rejuveneceremos.
Hablando de rejuvenecer, este fin de semana se está dando el Festival de Claridad que se le dedica a Rubén Berrios. Este Festival que ya es una tradición, como tantos otros eventos había sido pospuesto los pasados dos años a raíz del encierro por la pandemia. Pasé un rato el viernes y escuché a Roy Brown y Zoraida Santiago. Sus canciones son un clásico y sus voces siempre melodiosas. El paseo para mi fue como un “reality check” al reencontrarme con muchas personas contemporáneas y de momento realizar que nuestras cabelleras están llenas de hilos plateados y nuestros cuerpos han sufrido transformaciones notables. Realmente me pienso y me siento con juventud y aunque no pretendo ser lo que yo cuando joven consideraba una vieja ridícula, tampoco soy una vieja decrepita. Al contrario, en este momento de mi vida tengo mucha más conciencia del momento presente, de lo que hago y como lo disfruto a plenitud. Así que me disfruto lo que hago mucho mas que cuando era joven.
Bueno y hablando de actividades con contemporáneos, esta tarde es el concierto de Joan Manuel Serrat. Esta es su última gira antes de su retiro o jubilación de los escenarios. Entiendo que también va a ser una actividad repleta de “baby boomers” y contemporáneos que a lo largo de todos estos años hemos vivido a través de la música de este gran cantautor español, y más que español catalán. Espero que el concierto sea uno de remembranzas, poder cantar hasta desgalillarnos y seguramente secarnos una que otra lagrima de añoranza. Este concierto sin duda es un buen comienzo para este brumoso primer día de mayo, y será parte de ese aguacero que rejuvenece el alma.
Comento también algo sobre la película boricua que en estos días se exhibe en nuestros cines, Picando Adelante. Soy fiel creyente de que tenemos que apoyar nuestra industria local del cine. Esta producción cuenta con un excelente elenco de actrices y actores; así mismo con un excelente de equipo de producción. El tema sin embargo es una controversial, ya que trata de la siembra de cannabis como forma de producir capital. No quiero contar mucho para no dañarles la experiencia de que cada cual opine, pero puede haber reacciones mixtas sobre el tema. Subyacente está el tema de que son las gentes con capital fuerte quienes pueden legalmente lucrarse de este negocio. Negocio, que como el del tabaco y el alcohol, fomentan formas de codependencia a sustancias para el lucro de una industria que poco le importa la salud de las personas. El no contar con capital para este tipo de negocio, lleva al menos afortunado económicamente, a perpetuar formas ilegales de negociar. Así la trama se va desarrollando hasta un final un tanto novelesco. La película se puede ver y tiene sus momentos jocosos.
En fin, que hoy primero de mayo busco refrescarme un poco con asuntos más mundanos que todos los otros que nos afectan diariamente en nuestra querida isla. Los convido a todos y todas a que, tan pronto como puedan, se den un chapuzón en las primeras lluvias de mayo, con la esperanza de que, si no se nos pone la piel más tersa, por lo menos nos refresquemos el alma.