José Martí- diáspora caribeña y desarrollo político en el Caribe

Política

José Martí nacido en La Habana, Cuba el 20 de enero de 1859 y muerto en Dos Ríos, Cuba el 19 de mayo de 1895 es considerado el padre de la patria cubana, político, abogado y literato.Ciudadano magnífico del Caribe. Estuvo exiliado en los Estados Unidos trabajando allí como abogado y escribiendo literatura. Más importante, desde la diáspora comenzó, organizó y ejecutó la Guerra de Independencia de Cuba, La Guerra del 95.

Estando en los Estados Unidos Martí no olvidó sus principios revolucionarios y su misión de ver libre a Cuba y a Puerto Rico, las últimas colonias de España en América, precisamente como escribió Martí América con acento. Desde la diáspora intensificó y formalizó los compromisos que habían marcado a su vida como independentista. Fundó en New York el Partido Revolucionario Cubano (1892) que era el brazo político de la revolución cubana. Para Martí fue esencial que la revolución se hiciese con ideales de democracia y con un liderato civil y no militar. Una vez Martí conversó con el General Máximo Gómez, reclutó fondos y tropas en los Estados Unidos para la causa de la liberación de Cuba. Es de suma importancia recordar que Puerto Rico estaba incluido en los planes liberación para Cuba.

El Partido Revolucionario Cubano tenía la Sección de Puerto Rico. La bandera de Puerto Rico y la de Cuba era iguales, intercambiando sus colores y fueron muchos los puertorriqueños que lucharon en las guerras de independencia de Cuba. Esta afinidad por ambos pueblos se basa en las ideas del puertorriqueño Eugenio María de Hostos, miembro del Partido Revolucionario Cubano que manifestaba una unidad y afinidad, histórica, fraternal y hasta espiritual entre los antillanos y su geografía. Hostos también estaba en la diáspora. En realidad una Cuba libre e independiente no hubiese podido sobrevivir estando Puerto Rico como un baluarte militar de España.

El conocimiento de Martí de los Estados Unidos, su gente, su derecho y su política le sirvieron grandemente para crear la independencia de Cuba. Estando fuera de su patria no solo desarrolló el plan de liberación para el Caribe sino que comprendió los peligros que representaban la nueva potencia imperial estadounidense. Martí sí conocía el derecho estadounidense, ejerciendo la abogacía en el Estados Unidos, en España y Cuba su dominio de temas político-jurídicos, era único en su clase. El plan de Martí se distingue de los otros movimientos de independencia del resto de América Latina, a parte de ser más moderno en el tiempo, ser desarrollado desde fuera del Caribe y para el Caribe. Cuando murió Martí murió el nuevo proyecto de liberación latinoamericano. Esa vez fue para el Caribe y creado desde la diáspora.

Actualmente son tantos los caribeños en la diáspora. En lugares lejanos como los Estados Unidos y Europa, entre otros. En ellos también ponemos todas las esperanzas, para que con sus acciones e ideas nos apoyen y ayuden en nuestros procesos políticos. Aunque las situaciones económicas nos motiven a emigrar lejos, al igual que José Martí, somos del Caribe y el Caribe siempre nos necesita.