Psicoarte, amor, poesía y otros “Murciélagos de vidrio”

Con sonrisa contagiosa y mirada intensa, la poeta Emma Jeannette Rodríguez conversa con ternura y determinación sobre su adolescencia, su desarrollo como artista, cómo a través del arte puedes desarrollar con autenticidad la personalidad. Esa alegría que le da la palabra y poder moldearla a través de la poesía, así como publicar y auspiciar a sus colegas escritores. Y así es, la también editora y psicóloga ponceña, genuina y determinada, prolífica en diversas áreas de la vida y la cultura. Si piensan que eso es poco, Emma además es artesana, decana de disciplina en un colegio y hasta payasa certificada.

Recientemente presentó su poemario Murciélagos de Vidrio, en el Festival de la Palabra en Plaza, en una tarde de poesía y calor humano, donde también se hizo una presentación de la revista virtual Letras Salvajes, dirigida por el poeta Alberto Martínez Márquez y que nuestra entrevistada coedita.

“¿Por qué deseas mi cadáver

si los escombros de tu inocencia

ya no tienen oídos?”

E. J. Rodríguez

Ana María Fuster: ¿Cuándo sentiste el llamado de la poesía, la pasión por el arte? Tus influencias y motivaciones…

Emma Jannette Rodríguez: “Desde niña siempre he tenido la curiosidad del conocimiento, ese deseo insaciable de aprender lo que no conozco, El amor por lo desconocido, traspasando toda aquella línea académica establecida. Esa pasión por descubrir, imaginar y sentir, el interés de crear e inventar nuevas cosas.

“Recuerdo que como a los 13 años escribía canciones de navidad para obsequiárselas a mis padres y hermanos e interpretarlas juntos durante la noche buena (al frente del arbolito de navidad).

“En el 2001,  viajé a Chile para presentar una investigación relacionada a los estudios cualitativos, en el Congreso de Psicología efectuado en ese país suramericano.  Tuve la oportunidad de visitar las tres Casas Museo en Isla Negra, Valparaíso y Santiago de Chile que fuera los hogares del gran poeta Pablo Neruda, ganador del Premio Nobel de Literatura. Este momento marcó el interés que yo habría de tener por la creación poética y artística. Precisamente el arte y la creatividad sustentaron la redacción de mi tesis doctoral titulada Efectos del psicodrama en niños/as puertorriqueños/as entre las edades de ocho a once años diagnosticados/as con el trastorno por déficit de atención con hiperactivida”.

“El arte me ha regalado la libertad de mi propio Yo. Esa parte de tu personalidad que te hace sentir auténtica, distinta e irrepetible. Y eso es bueno sentirlo y amarlo cuando se trata de tu propia historia. Siempre he caminado inventando mis sueños y diseñando metas.”

“Nací ayer

sentí la luz

que reflejó toda mi historia

hoy no  me veo

sólo recuerdo la luz”

E.J. Rodríguez

AMF: ¿Qué significa la poesía para ti? ¿Cuánto hay de ti en tus poemas? ¿Incursionarás en la narrativa?

EJR: “La poesía para mí es historia con una atmósfera encantada. Es el proceso que te lleva a experimentar diversos mundos subjetivos sin limitaciones. Es el lenguaje de lo simbólico y representativo de todas las historias almacenadas en tu memoria.  Es la palabra interna, latente, la que se convierte en desvelo para los otros (los lectores). Es un nacimiento de probabilidad convertido en certeza.  Es la oportunidad donde el poeta crea sus propios juegos del caos imaginario. Es la ruptura de la rutina folklórica.

“Mis poemas cumplen con la armonía de lo que yo deseo experimentar. Pienso que todos nacen de mi núcleo imaginario vivo y se transmutan con el tiempo. No descarto experimentar con la novela, cuento o relatos, aunque te confieso que tengo un interés obsesivo con los versos, y las prosas poéticas.”

AMF: Eres una mujer que irradia amor y alegría. ¿Cuál es la importancia del amor en tu creación literaria y artística? ¿En la vida?

EJR: “El conocimiento de tu capacidad humana (con tus fortalezas y debilidades) y no un “YO dioscéntrico” como yo le llamo, nos sensibiliza al amor y a la alegría, es mi principio.

“Para mí el amor es la libertad que tengo sobre mis letras. Esa comunión de sentirme viva en cada uno de mis versos.  Es la forma en que seduzco al lector y lo llevo a un mundo  incomprensible, lleno de expresiones e imágenes trastocadas

de la realidad. A mí me gusta jugar a creerme;  ser cualquier cosa, lo que se me ocurra, y transmitir una influencia de búsqueda. El amor es la rebelión de mi poesía, la oscuridad sublime y  musicalidad, es la fuerza que me provoca vértigo y éxtasis.  Así es como yo veo el concepto del amor en mi poesía según decía Octavio Paz, uno de mis escritores favoritos; “el amor y la poesía se convierten en las «puertas del ser”.”

AMF: Es tan necesario vivir así mismo el arte y la cultura. Leí que dirigiste en Yauco un centro cultural, “Casa del Arte con Olor a Café”, coméntanos sobre este.

EJR: “La Casa del Arte con Olor a Café fue un sueño hecho realidad que compartí por unos años con una gran amiga y artista plástica la Sra. Diana García. La fundamos en el 2006, en Yauco. Este espacio fue una galería y taller de creatividad, que sirvió para la exposición de artistas plásticos de la zona Sur de la isla; a la vez  como punto de encuentro para cultores de la poesía y músicos. También ofrecimos talleres creativos para niños y niñas.  Ana María, para ver las fotos y tener un concepto más amplio del lugar puedes visitar: http://artehybridos.blogspot.com/2011/04/casa-del-arte-con-olor-cafe.html”

AMF: Y del mundo del cultural, caemos en la ciencia, eres doctora en sicología, pero sin desligar tu compromiso con el arte. Tanto así, que practicas y trabajas el “Psicoarte”.  ¿De qué se trata este concepto psicoarte? ¿Cómo lo desarrollas?

EJR: “Para mí el psicoarte es un espacio de encuentro; de pensamientos, sentimientos, introspección, creatividad, imágenes, drama, sabiduría y libertad.  La palabra psicoarte se refiere a la integración de dos conceptos:  psique (mente) y arte.  Cuando hablamos de psicoarte a nivel terapéutico es el proceso que nos devuelve el camino deencontrarnos y pertenecernos. Es promover una buena salud emocional, social y espiritual.  También es encontrar puntos de apoyo y referencia y vivir un proceso de rehabilitación conductual e integración a una vida independiente. Sus bases fundamentales son: la creatividad y la espontaneidad.

“En lo personal el psicoarte ha sido una experiencia evolutiva tanto en mis años de estudios (11 años) como en lo personal. Actualmente trabajo en un proyecto literario psicoeducativo que pienso publicar posteriormente titulado: Imagen, Cuerpo y Caja Musical, relacionado con el trabajo psicodramático que realicé para mi disertación doctoral.  Desarrollé una guía psicodramática  para niños  puertorriqueños diagnosticados con el trastorno de déficit de atención con hiperactividad.

“Por otro lado, el psicoarte (utilizando la poesía)  fue al rescate de mi proceso de infertilidad. Te diría que ayuda a crear hilos tenues para halar y completar un todo: nuestra existencia como seres humanos “psicosocioespirituales”. Desde entonces sí he procreado hijos literarios. Si miro hacia atrás dentro de mi perspectiva es un recurso sanador.

“También encamino un proyecto titulado: “Innovación Psicoarte” donde promuevo el arte como herramienta psicoterapéutica y educativa, con la posibilidad de integrar modelos innovadores y de expresión artística, promover el uso de recursos artísticos como el cuento, la poesía, la danza con telas, los collages, el psicodrama, la música, el dibujo, la pintura, las artes plásticas, la escultura, las máscaras,  los instrumentos primitivos, la artesanía y el humor entre otros. Promover y fomentar el bienestar del niño con su uso. Ofrecer  talleres psicoeducativos preventivos en el desarrollo de destrezas que permitan mejorar nuestra calidad de vida, y realizar actividades educativas y culturales para nuestros niños y jóvenes. Ana María, para obtener más información del proyecto puedes visitar: http://innovacionpsicoartepr.blogspot.com”

AMF: Emma, y es que he impactada por todos los mundos que habitas, todas esas mujeres eres, y que puedes ser. Pero, ¿payasa profesional certificada? ¿Cómo es la Emma payasa? ¿Cómo llegaste a esta profesión?

EJR: “Sí, en realidad me gusta invertir en mis talentos como mujer y compañera de vida, psicóloga, decana de disciplina, artesana, escritora, poeta y payasa profesional. El polifacetismo es otro rasgo fundamental del ser humano. Desde niña sentía la capacidad de realizar diferentes cosas a la misma vez. Me encantaba actuar, tanto así que le comenté a mi mamá que quería ser actriz de Hollywood. Recuerdo que diseñaba vestimenta y maquillaje para mis personajes favoritos. Nunca faltó imitar a la Mujer Maravilla y maquillarme como Boy George.

“La contemplación, la acción y la producción son tres piezas claves en la versatilidad. La contemplación es la capacidad de admirarse en su realidad y pensarla, la acción es esa intervención que llevas a cabo con la naturaleza y la sociedad, y la producción es lo que creas a raíz de tu intelecto con sus relaciones. Es maravilloso actuar en la vida y protagonizar distintos papeles, generas conocimiento y aumenta la capacidad de desarrollar tus potencialidades. Cabe señalar que durante el desarrollo mis padres fueron “Bandera” que con su motivación pintaron los colores de mi identidad.

“En el 2002 me certifiqué como payasa profesional “Rayito de sol” en el Taller para Nuevos Payasos de Ponce. En mi graduación fui la mejor proyección de personaje payasa cara blanca. Pienso que el humor es el mejor compañero que debemos tener. Como parte de mi proceso en el desarrollo del psicoarte fue necesario descubrir el mundo artístico infantil, donde la risa, el juego y el humor son herramientas importantes para el bienestar emocional de los niños. La risa es una hermosa puerta para la interacción con los demás.”

AMF: ¿Cómo sitúas a la mujer frente a la difusión del arte? ¿Crees que hay obstáculos para nosotras en el mundo cultural puertorriqueño? ¿Cómo podemos ir venciéndolos?

EJR: “La mujer es un puro reflejo del arte. Simplemente con su bella existencia natural se complace en provocar ciertos atributos que son sumamente importantes de recordar. Por ejemplo, su nacimiento valorativo (una Eva evolutiva),  la transformación de la mujer en la cultura actual, la liberación de su intelecto, la conquista de su palabra, su fecundidad emocional, su tarea deconstructiva del género, la complicidad de su creatividad y espontaneidad, la sensibilidad de su espíritu, la mujer como elemento revolucionario atmosférico, y la mujer como sensibilidad creadora. Para mí,  todos estos aspectos son motivos de una máxima reflexión cuando se trata de mujer y arte. …

“En relación a los acostumbrados obstáculos me gustaría hablar sobre sus posibilidades en el mundo cultural puertorriqueño. Son muchas las posibilidades. La mujer puertorriqueña cuenta con elementos activos en su amplio terreno cultural.  Las condiciones se establecen según la visión de la mujer. El acceso de formación e información validan ese deseo de revolución cultural. Por ejemplo, en la literatura femenina estoy de acuerdo con Begoña García en su cita: que por fin la mujer puede escribir  “hoy como mujer”. Sobre sí misma (la mujer) es importante reconocer su propio mundo para entregarlo sin limitaciones. Creo que nuestra actuación social de creer que existen obstáculos al desarrollo de nuestra propia identidad (que es cultura viva) minimiza el autoprogreso  y desvaloriza la naturaleza femenina. Creo que el pensamiento correcto ante una autovaloración cultural es sentirse digno de merecer lo que realmente queremos entregar.”

AMF: Emma, ¿dónde te visualizas de aquí a 20 años?

EJR: “Es importante esta pregunta porque, ¿cómo te ves en 20 años?, es el resultado presente del reflejo de tu vida. Para mí, el presente habla a la memoria de lo que somos. Y El futuro es el  resultado de la memoria inexistente. Por lo tanto,  yo a los 58 años me visualizo la mujer que soy a mis 38 años, una mujer plena, feliz, viviendo  ilusionada con su presente, inventando proyectos,  aferrada a su mundo imaginativo, escribiendo trastornada con locura literaria, y  amando lo que soy: una mujer.

“Gracias Ana María por el detalle de unirme a tus proyectos a través de esta única experiencia y por el interés de conocer mi mundo interior.”

Emma, soy yo quien debe agradecerte abrirnos para esta entrevista a tu mundo y todas las mujeres que te habitan, la que eres y todo lo que nos brindas con tu obra literaria, gestión cultural y su fusión con la psicología. Sobre todas las cosas, una bella cofradía. Esperamos seguir leyendo nuevos poemarios, sorprendiéndonos con esos innovadores proyectos a los que nos tienes acostumbrados. Salud. ¡Que viva la poesía y la intensidad de sentirla en cada momento del día!

Datos biográficos de Emma Jeannette Rodríguez Feliciano

Nace el 17 de mayo de 1974, en Ponce, Puerto Rico. Doctora en piscología clínica, escritora, artesana, poeta, payasa profesional certificada, promotora cultural y del Psicoarte. Promulga una teoría de terapia a través de la expresión corporal y recursos artísticos. La producción literaria de la Dra. Rodríguez Feliciano está compuesta por la poesía en verso, prosa poética, minirrelatos, y reflexiones breves. En 2009 publicó su primer poemario Soles Mojados de una Niña Azul (Eds. Gaviota) y, en el 2011, el poemario Murciélagos de Vidrio y el poemario digital La Máscara del Pájaro Nocturno. Participó como escritora invitada en la XIV Feria del Libro en Santo Domingo (2011) y en  Encuentro de Poetas De la Ciudad a la Montaña (2012). Próximamente publicará con la Editorial Isla Negra su libro de prosa poética El truco de la loca. Además, tiene a su haber sus libros inéditos; Imagen, Cuerpo y Caja Musical, Donde mueren las golondrinas y Circo para una mujer dormida. Sus poemas se han publicado en la Revista Puertorriqueña Letras Salvajes. También se publicado sobre su poesía en los siguientes blogs: Ciudad de las Amapolas, Poetas del Siglo XXI, y Fantasmagorías de genérika. Y en el periódico digital el  Listín diario. En el 2012 participó en la antología EROTIKA, Lujuria Poética Iberoamericana. Actualmente, junto a su compañero de vida el poeta  Alberto Martínez Márquez, comparten el taller Arte Hybridos.

“Sálvame

de las bocas nocturnas

de los murciélagos de vidrio

de los huesos inventados

de los mudos deshabitados

Sálvame

de la inocencia vencida”

Emma Jannette Rodríguez