¿Quién mató a Jeffrey?

Justicia Social

Desde hace unos días los sistemas mediáticos y de prensa en Puerto Rico, representaron los últimos días de un pequeño niño llamado Jeffrey de 10 años de edad, quien sufrió algún tipo de accidente, el cual le produjo muerte cerebral. El jueves pasado, luego de haber sido separado de las maquinas que lo sostenían con vida, pereció – precisamente a los 12 minutos de haberlo desconectado. Este tema ya lo en habíamos abordado en varias columnas pasadas. Dicho lo anterior, el caso de Jeffrey cobra un valor distinto, cuando en los últimos días antes de su muerte, y luego de que muriera, el estado comenzó a preguntar por qué murió. ¿Quién mató a Jeffrey?

Se trataba de una incógnita que produjo muchos rumores. El padre y la madre siempre dijeron que se trató un accidente, habiéndose el niño caído de la cama. Por otro lado, surgió un rumor persistente que el primito de Jeffrey, otro niño de ocho años, había sido el responsable. En particular se narraba un rumor que el primito le pegó de forma certera en dos ocasiones con un bate, primero en la cabeza y luego en un brazo, lo cual produjo el resultado fatal.

 

Mi gran preocupación, en un país donde castigar de forma punitiva es más importante que sanar y reconciliar, era que fueran a castigar de forma punitiva al pequeñín del primito, lo cual para un delito tan severo, en la modalidad de falta para un menor de 18 años, conllevaba algún tipo de cárcel remedial. En otras palabras, en Puerto Rico, y de verdad que no sé como le va al resto del Caribe en este asunto, tiene niños presos de apenas ocho años.

La buena noticia fue que hoy, luego de múltiples rumores, el Instituto de Ciencias Forenses de Puerto Rico, determinó que efectivamente el niño había muerto a causa de una caída de la cama. Terrible historia, pero en el marco de lo peor, se salvó un primito de ser otra víctima más de esta tragedia infantil.