Todo el mundo se ha sentido aludido por algún comentario que un amigo o pareja ha emitido. Quizás alguna vez dijiste “no es nada, estoy bien” esforzándote por disimular todo el dolor que sentías. A muchos les ha sucedido que estando molestos en el trabajo llegan a casa y desplazan su ira contra quien primero diga hola. Entonces, conocemos en vivo los mecanismos de defensa.
Pareciera que son cosa del pasado, considerando que el origen del concepto proviene del psicoanálisis en los años mil ochocientos. Al parecer Freud fue muy certera al enumerar algunos métodos que los seres humanos utilizan para manejar conflictos. Incluso hoy día la Asociación Americana de Psicología les da el nombre de “estrategias de afrontamiento” reconociendo su pertinencia en la actualidad.
La pregunta inevitable es, ¿qué son los mecanismos de defensa y cómo interfieren en mis relaciones? Descrito de forma muy sencilla los mecanismos de defensa son las herramientas conductuales que utilizamos para tratar de mantener estabilidad a nivel emocional. Para ver como nos afectan en las relaciones interpersonales es imprescindible mencionar y describir algunos de estos mecanismos.
Aclarando que en la mayoría de los casos esto se da a nivel inconsciente sin mediar decisión o análisis por parte del que usa el mecanismo. Simplemente la persona percibe que algo anda mal y utiliza el mecanismo para defenderse de forma automática como un reflejo.
- Disociación: la mente olvida totalmente eventos que pueden ser dolorosos como fechas, accidentes, conversaciones.
- Proyección: Un ejemplo de esto pudiera ser el adjudicar un sentimiento o emoción propia a otra persona. A nivel inconsciente no acepta que esta triste, enojado, frustrado por lo que insiste constantemente en que los demás son quienes cargan estas emociones.
- Negación: Busca protegerse actuando como si el evento traumático no existiera.
- Regresión: La clásica explicación de este mecanismo se ilustra en el niño que al nacer su hermano se comporta como de menos edad. También lo vemos en adultos que niegan su etapa de vida comportándose como adolescentes o niños.
- Desplazamiento: Una ilustración de esto es el padre que abusa de sus hijos por que discutió con su esposa o por que no le dieron el aumento que deseaba.
- Racionalización: podríamos decir que es el justificarse así mismo. Es aquel que llega tarde por que no se preparo a tiempo y se dice así mismo que lo hizo ya que nunca comienzan a tiempo.
Cuando los mecanismos de defensa no son suficientes, las emociones entran en un desnivel creando crisis, stress, depresión y ansiedad. Por un lado son estrategias de cuidado que nuestra mente utiliza para ayudarnos. Por otro pudiera alejarnos de nuestros seres queridos. En mi opinión si en el proceso no se logra aceptar, trabajar, entender y canalizar el evento y las emociones el individuo corre el riesgo de sobrecargar al que está cerca. Es por medio de la introspección que podemos lograr trascender las experiencias traumáticas. Haciendo claras nuestras preocupaciones o situaciones internas no enfrentadas. En la mayoría de los casos el proceso de ayuda terapéutica puede facilitar este proceso de autoanálisis. Brindando nuevas estrategias para enfrentar tangiblemente nuestros problemas.
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