San Juan- La mayoría de los 80 mil pacientes de epilepsia en Puerto Rico continúa sin recibir los servicios necesarios del gobierno para atender su condición neurológica, a lo que se agrega el desconocimiento y el déficit de especialistas pediátricos.
Según el vicepresidente de la Sociedad Puertorriqueña de Epilepsia (SPE), Alex Ramírez, existen grandes retos por la dificultad de acceso a servicios médicos de calidad, lo que obliga a un gran número de niños a esperar un año para que un médico los evalúe.
A esta situación se unen las trabas que imponen las aseguradoras para autorizar la realización de estudios diagnósticos y los medicamentos o los tratamientos relacionados con el padecimiento, según el diario El Nuevo Día.
Hasta hace dos años, los pacientes puertorriqueños de epilepsia tenían que viajar a Estados Unidos para someterse a una lobectomía, procedimiento quirúrgico que puede reducir los ataques de epilepsia a uno o dos al año.
El origen de la epilepsia es diverso y puede ser el resultado de golpes en la cabeza, uso de drogas y alcohol, problemas en el embarazo y el parto, enfermedades o tumores cerebrales.
La SPE reveló que ayuda a unos mil 500 pacientes anualmente para que reciban tratamiento médico.