Avanza en Dominicana enfrentamiento a violencia de género

Justicia Social

Santo Domingo- Las recientes medidas adoptadas por el Ministerio Público de República Dominicana para enfrentar con mayor eficacia la violencia de género y los feminicidios muestran hoy resultados positivos, según autoridades.

Tras el lanzamiento de la Declaración de Compromiso de las Instituciones y Organizaciones para la Prevención de la Violencia de Género, el pasado 1 de noviembre, el número de casos de tales problemas ha disminuido.

Cada vida salvada nos demuestra que vale la pena el esfuerzo que estamos realizando junto al Ministerio de la Mujer y la Policía Nacional, afirmó el procurador general, Francisco Domínguez.

Puntualizó que la prioridad en estos momentos está en poner a salvo a la fémina amenazada y luego perseguir al agresor.

En el actual mes la violencia de género ha dejado dos dominicanas sin vida, la tercera parte de la cifra registrada en noviembre de 2011, y los victimarios fueron detenidos y sometidos a la justicia, apuntan informaciones oficiales.

Dicho fenómeno clasifica como uno de los principales males de la sociedad dominicana por las marcadas diferencias entre hombres y mujeres.

Para autoridades y especialistas en el tema, resulta urgente construir nuevos patrones de conducta que rompan los comportamientos tradicionales, responsables muchas veces de la actual situación.

A juicio de la ministra de la Mujer, Alejandrina Germán, cuando la sociedad aprenda que varones y hembras tienen los mismos deberes y derechos, entonces comenzará a disminuir el índice de casos violentos.

Diversas fuentes apuntan que durante 2012 el número de feminicidios es superior a 150 y al cierre de diciembre la cantidad puede superar el registro de períodos precedentes.

Según datos oficiales, en 2011 fueron asesinadas 233 dominicanas, y las unidades de atención integral a la violencia de género, intrafamiliar y delito sexual recibieron 67 mil denuncias.

En opinión del procurador general, siempre será mejor prevenir que perseguir, estrategia que debe estar acompañada de programas dirigidos a la educación, el respeto y el amor a la vida desde el seno familiar.