¿Avance tecnológico significa cambio en condición humana?

Política

Los avances en la ciencia y tecnología han cambiado la manera de conocer de una forma tan rápida y drástica que no es atrevido decir que la enseñanza e investigación universitaria se transformarán inimaginablemente en un futuro no tan lejano. La pregunta no solo para los educadores, sino para todos, es si la condición humana mejorará a la par con estos adelantos. Esta y otras son temas e incógnitas que se están levantando en la Décimo Cuarta Conferencia Anual de la Asociación Internacional de Universidades, celebrándose ahora en San Juan.

La organización, que agrupa instituciones a través del globo y es parte de la UNESCO, dedica su conferencia a explorar el tema de “la Educación superior y la agenda global: alternativas para el futuro”. La pregunta se asomó en la misma sesión plenaria de apertura. Aún para muchos educadores era imprevisto hace 10 o 15 años que la magia de las ciencias y la tecnología de información redundaría en los profundos cambios y hábitos de conocimiento de hoy, dijo Ismail Serageldin, actual director de la Biblioteca de Alejandría en Egipto y expresidente del Banco Mundial. En una corta pero intensa alocución, Seregeldin sugirió unas estrategias para que las universidades del futuro puedan evolucionar con los cambios y exigencias de las sociedades modernas. Su presentación enfatizó que las universidades tendrían que prepararse para integrar materias y disciplinas en un sistema de informática en que la totalidad del conocimiento humano será accesible al momento.

E. Nigel Harris, Vicerrector de la Universidad de las Antillas en el recinto de Jamaica, observó que a pesar de los avances en el mundo científico y tecnológico la condición humana no está cambiando de la forma “que desearíamos”, en referencia a las crisis de conflictos de guerra y hambruna. Serageldin se declaró optimista que la humanidad podrá encarar estas condiciones milenarias. “Nuestras expectativas (de desarrollo tecnológico) siguen creciendo y con ellas nuestras exigencias (para que mejore la condición humana)”. Explicó que después de la Segunda Guerra Mundial y el Holocausto, nunca se pensó posible que una organización como las Naciones Unidas fuese viable.

El egipcio también pronosticó que debido al veloz cambio en el área esencial de investigación y desarrollo, el modelo linear que existe actualmente en las universidades, que culmina en la entrega al estudiante de un diploma tras X años de estudio ya no tendrá validez en el futuro. Los profesionales y académicos tendrían que seguir validando sus credenciales con estudios continuados ante los rápidos avances del conocimiento. Gracias al desarrollo de los sistemas de informática, el conocimiento se está integrando y reagrupando más cada día, y las disciplinas académicas tanto científicas como humanísticas se irán transformando en nuevas disciplinas y se cruzarán; para estos cambios rápidos tiene que estar preparada la universidad del futuro, dijo Serageldin. Como ejemplo de los avances que ya existen debido a la revolución de las computadoras mencionó a los cursos “online” ya disponibles en muchísimas universidades, incluyendo la universidad anfitrión de la conferencia, la Universidad Interamericana de Puerto Rico.

El uso del libro en su forma material como instrumento principal de la enseñanza será cosa del pasado. Sus ya existentes versiones online lo reemplazarán, dijo con un gesto de lamento el bibliotecario. Habló de una biblioteca carente de libros pero llena de una cantidad enorme de información en sistemas computarizados. Ya hay por lo menos una, dijo Serageldin: la de la Facultad de ingeniería de la Universidad de Texas-San Antonio). Sin embargo, pronosticó que la Universidad como espacio físico perdurará ya que es un centro que sirve como centro social y de interacción.