Justicia para el pueblo: no más colonia

Justicia Social

En el pasado plebiscito realizado en Puerto Rico durante las elecciones generales del 6 de noviembre de 2012, el 54% de los que participaron en las elecciones ese día, votaron que no desean continuar en la presente relación colonial con los EE.UU. Esta manifestación es única en su clase. Es la primera vez que el pueblo se expresa de esta forma. Es algo a celebrar, sobre todo si usted no desea seguir vinculado como se encuentra en la actualidad con los EE.UU.

Lo más interesante de este plebiscito, y que conste que el mismo fue un acto voluntario del gobierno de turno de Puerto Rico sin ningún compromiso con el gobierno de los EE.UU, lo es el siguiente asunto: el gobierno de los EE.UU, tanto por vía de la oficina del Presidente Barak Obama como por múltiples congresistas, ha dicho que ha de tomar en serio la voluntad del pueblo de superar la relación colonial. Esto es algo interesante y no esperado. Sobre todo, porque muchos subestimaron en la isla si el gobierno de los EE.UU habría de tomar en serio este evento. Todo indica que lo están tomando en serio, y algo tendremos que hacer de forma colectiva, si la respuesta de la metrópoli es en serio.

En este sentido, nos parece que el grupo social que más ruido ha hecho en cuanto a este plebiscito, de forma pública lo es un movimiento pro-.anexión llamado Boricua, ¡ahora es! Dirigido por el hijo el joven dirigente pro-anexión, Ricardo Rosselló, dicho grupo que defiende la incorporación total de Puerto Rico a los EE.UU, está afirmando este proceso desde una óptica pro-americana. De otro lado, el movimiento social pro un estatus de autonomía política, el llamado ELA Soberano, liderado por la Alianza Pro-Libre Asociación Soberana (ALAS), también intenta impulsar un ojo crítico descolonizador, aunque para sorpresa de algunos, vive explorando alianzas con el movimiento Boricua, ¡ahora es!

Los múltiples independentismos, no obstante, no logran encontrar un punto común para promocionar solución al estatus de la isla. El Partido Independentista Puertorriqueño, intenta vender ese 54% a nivel internacional, aunque en la repartición de los votos en dicho plebiscito, donde la independencia como opción de solución de estatus obtuvo menos del cinco porciento del favor del electorado, no es aliciente ni para ellos ni para la voluntad de independencia del pueblo.

En fin, que debemos buscar justicia para el pueblo de Puerto Rico. Nos hemos cansado de la presente relación colonial con los EE.UU. Esta no puede continuar. ¡Ni un día más de colonia!