El viernes, 7 de diciembre, la clase PSYC14 de la Ponce School of Medicine & Health Science celebró el Foro: La Violencia Nuestra de Cada Día… una mirada transdisciplinaria al problema de violencia en Puerto Rico. El evento se realizó en el Edificio de Psicología de la Escuela de Medicina y Ciencias de la Salud. En la actividad presentaron sus ponencias varios expertos-panelistas, quienes hablaron desde sus campos de expertise, sobre múltiples factores del tema de la violencia, en particular, la que acontece en la nuestra Isla.
La actividad se llevó a cabo desde las 8:00 a.m. e intervinieron los panelistas: Profa. Luisa Seijo, Dr. Michael González, Dra. Linda Laras, Profa. Ilia Vázquez, Dra. Sheila Rodríguez Madera, el Licenciado y Psicólogo Social Alexis Rodríguez y la Dra. Sonia Serrano.
El Licenciado y Psicólogo Social, Dr. Alexis Rodríguez, en su ponencia: “La legalización de las drogas como alternativa para la reducción de violencia”, analizó las diferentes vertientes del asunto y explicó cómo en otros países, como el caso de Holanda, ha funcionando ante el problema de la criminalidad. También mostró cómo en países, como Uruguay, el gobierno actual, está buscando y planteando la legalización de la marihuana, como una alternativa de reducir el narcotráfico. El gobierno uruguayo mediante un Proyecto de Ley sostiene que sí es posible controlar y suministrar efectivamente la sustancia a los ciudadanos, es una manera en la cual se le puede dar un golpe económico a las organizaciones criminales, promueven drogas ilegales.
Y que en vez de limitarse a procesar criminalmente a los usuarios del cannabis, se debe enfocar en la prevención, en la rehabilitación y no criminalizarlos.
Por su parte la Dra. Sheila Rodríguez en su exposición “La violencia como determinante social de la salud”, se expresó sobre diferentes factores sociales vinculados con la criminalidad. Se refirió al contexto político estructural, socioeconómico de Puerto Rico, y consideró, en este marco los aspectos como la salud integral, tanto emocional como física. Reiteró la importancia de la educación en el seno de la familia, y el manejo de conflictos y de las emociones; incluso hizo varios señalamientos sobre la nutrición de un ciudadano estable y en plena salud “Cuando uno mira el contexto de Puerto Rico, nos damos cuenta que hay múltiples variables que afectan el ejercicio de ese derecho y, por ende, afectan negativamente a que se pueda disfrutar de la salud.” expresó la Dra. Rodríguez.
El foro fue muy completo, organizado y pertinente. Se discutieron y se buscaron alternativas a una de las problemáticas sociales de mayor preocupación en Puerto Rico, que es la violencia de todo tipo, que desafortunadamente, en los últimos años, lejos de reducirse se ha incrementado y mostrado manifestaciones de gran agresividad y extendido, no solo al área metropolitana sino en todas las regiones de la Isla. Violencia manifestada en diferentes tipos, desde la violencia doméstica, hasta los crueles asesinatos que han ocurrido recientemente en Caguas y en la ciudad de Ponce, por mencionar solo algunos que han consternado al país.
La realización de estos foros es fundamental y necesaria, pues se estudia la conducta humana violenta desde un trasfondo cultural, social, económico, y político, desde sus raíces pues como muchos entendemos la violencia en su mayoría no es espontánea lleva consigo un raíz que se va desarrollando con el tiempo y con diversos factores socioculturales. Además fue interesante que los foros se propusieron otros puntos de vista de cómo se debe tratar la violencia. Por ejemplo, se analizó cómo en Puerto Rico, algunos gobiernos, se han amparado, para tratar la criminalidad, solo en un asunto de “ley y orden”, algo que al parecer con la alta tasa de la criminalidad de este año (una de las más altas de la historia) vemos que no es suficiente pues deja de lado una compleja red causal. Precisamente, en las conferencias se abordaron esas causas de raíz y se exhortó a que el gobierno se plantee el problema de la criminalidad, no como algo de cuatrienios, sino como un proyecto a largo plazo, para obtener resultados positivos y concretos y que la violencia deje de ser una “nuestra de cada día”.