Entre los jóvenes más ricos, estamos los pobres de la tierra

Economia Solidaria

La revista Forbes, ese baluarte del capital corporativo e individual, acaba de publicar la lista de los 23 jóvenes más ricos del planeta. Joven es una categoría de menos de 40 años. Son todos jovencitos que lo heredaron o que hicieron, sobre todo en el mundo de la informática digital. Ahora bien, ¿debemos celebrar su éxito económico? De mi parte la indiferencia es una medida adecuada a su riqueza.

El problema no es que sean los más ricos de su edad. El problema, en la larga tradición de la revista Forbes, es seguir celebrando la riqueza como un bien común. La riqueza de unos, es relativa a la pobreza de muchos. Por otro lado, en el paradigma de ser millonario, hoy Forbes nos impone el valor de ser mil millonario. Pero, ¿para el que ha sido asalariado, pobre, pequeño empresario, le hace alguna diferencia lo que nos dice Forbes? Me parece que no.

Promover una economía de solidaridad es promover una forma de vida donde la riqueza como medidor de éxito no es uno a destacar. Por el contrario, lo que hay que motivar es el valor del bienestar individual y colectivo, lo cual no se mide por dinero sino por elementos que garantice la realización de una vida plena. Buena salud, buena educación, un medio ambiente libre de violencia para todos y todas, y sobre todo poder sentirse digno. Estos elementos no pueden tener valor económico o de intercambio.

En este sentido lo que le deseo decir a la revista Forbes es que lejos de valorar la riqueza, debemos valorar la vida de todos y todas, y promover identificar los mil millonarios que sean donantes para los pobres. Sin lugar a dudas Zuckeberg lo hace a través de su fundación Star Up, la cual va dirigida a transformar la educación en los estados de los EE.UU. ¿Es suficiente? No sabemos. Luego del primer millón, el segundo trae más deudas. Luego de mil millones, no es posible tener deudas. Así que como sugiere Warren Buffett otro de los mil millonarios, es mejor donar.