En el ámbito de la política local, la representante y ex presidenta de la Cámara de representantes por el partido anexionista P.N.P. Jenniffer González, también conocida afectuosamente bajo el nombre de “JGo” realizó una conferencia de prensa para criticar la campaña publicitaria del gobierno de “Isla Estrella”, entre otros asuntos relacionados con los asesores y cabilderos estadounidenses del gobierno.
El análisis crítico es algo bueno, en el sentido de que cuando se cuestionan las políticas del gobierno críticamente es posible ganar otra perspectiva sobre el asunto. En otras palabras es sabio preguntarse más allá los asuntos y no simplemente adoptarlos por convicción. No obstante, criticar por criticar no es un ejercicio inteligente.
La realidad es que el hecho de que JGo critique la campaña de “Isla Estrella” es jocoso. Ya que el PNP se había adueñado por décadas la imagen de la estrella de cinco puntas como su símbolo político, y actualmente el gobierno del PPD lo está usando como un emblema relacionado con el Estado Libre Asociado. Desde el gobierno del Dr. Pedro Roselló, y hasta antes, los miembros del PNP muy apasionadamente han estado poniéndose en sus vestidos una estrella dorada, y todo en alusión a que la Isla fuese la próxima estrella añadida a la bandera de los Estados Unidos; al ser la Isla anexionada e incorporada como un estado federado. En síntesis, lo que ha pasado es que la estrella estaba siempre asociada al PNP y ahora el PPD se la apropió.
Una estrategia similar a como ocurrió en la pasada campaña electoral, cuando el PPD se apropió del nombre “domain” de luisfortuño.com para incluir una página web, con propaganda en contra del ex gobernador Luis Fortuño y gobierno del PNP. Un tipo de jaqueo legal, que mediante la agresividad y disposición de fondos, atacó las sensibilidades del pueblo de manera eficaz, básicamente confundiendo.
La crítica de JGo fue a los efectos de enfatizar que el mensaje es contradictorio con las otras campañas de cabildeo, en las cuales el gobierno está gastando cientos de miles de dólares (USD) para proponer lo opuesto. En otras palabras, que en la Isla se quiere decir una cosa y en los Estados Unidos otra, por presentar en la Isla publicidad en pro de los Estados Unidos, y allá a fuera, todo contrario; pretendiendo cabildear para dar una imagen de que Puerto Rico es un país extranjero.
Nada nuevo para los que conocemos un poquito de la política de la Isla con los Estados Unidos, donde todos los partidos siempre han dicho una cosa aquí en español y luego van a los Estados Unidos y dicen otra cosa.