Como si fuera poco, hace unos días del gobierno revolucionario de Cuba, por virtud de su presidente Raúl Castro, acaba de hacer un anuncio de trascendencia monumental para todos en el Caribe: en el 2014, Cuba inicia la construcción de una región de libre comercio en el puerto de Mariel, que albergará entre otras cosas una zona franca para importar y exportar productos, y un mega puerto de trasbordo y descarga.
El efecto de esta acción de naturaleza económica afecta de forma puntual a países como la República Dominicana y Puerto Rico. En particular a la República Dominicana que ya cuenta con varias zonas de libre comercio, pero también con un puerto de trasbordo. Por otro lado en el caso de Puerto Rico, territorio colonial de los EE.UU que ya cuenta con varias zonas francas, pero que aún luego de varios fallidos años no ha logrado habilitar un puerto de hondo calado de trasbordo, y menos aún insertarse en los debates post-Panamá (súper cargueros).
La Zona Especial de Desarrollo de Mariel se establece a un costo de $900 millones de dólares. Es un proyecto compartido entre Brasil y Cuba, en el cual el coloso del latinoamericano invierte en suelo caribeño la cantidad de $640 millones de dólares. Se establece dicha zona de libre comercio para la venta, reventa, importación, exportación, y mercadeo de productos nacionales e internacionales, libre de arancelas e impuestos tributarios que pudiera imponer el gobierno de Cuba. La empresa Odebrecht de Brasil es la que ha estado al tanto de este proyecto, estableciendo distintas instalaciones en este parque de libre comercio.
Para Puerto Rico, independientemente de su irresuelto estatus territorial colonial, esta situación constituye un rudo golpe al desarrollo de nuestra economía. En particular, dado que por problemas internos, no se logran poner de acuerdo las distintas personas y tendencias del quehacer nacional, y el país continúa quedándose rezagado en el Caribe. Sobre todo, que desde hace ya seis años Puerto Rico goza de un mega puerto de trasbordo, en la ciudad sureña de Ponce, el cual no ha logrado se habilitado y puesto en marcha. Han pasado varios años, varios gobierno y dicho puerto sigue aún sin activarse.
Adelante en Cuba en el 2014. A la espera y rezagados en Puerto Rico en el 2014.