Paciencia: la ciencia de esperar en paz. Esperar y descubrir la ciencia. La ciencia de esperar. Esperar lo que venga. ¡Que venga lo mejor!
Lo mejor de esperar es desarrollar la paz de buscar la ciencia de la espera.
La espera de descubrir algo innovador con la ciencia. La ciencia de esperar respirando suave y profundo.
¿Entonces? ¿Qué esperamos? ¿Qué esperar?
No escatimar para ser jardineros. Sembrar campos inmensos durante la alborada de virtud.
¿Qué crear afinando la técnica de la ciencia?
Solo espero. Esperamos. Esperamos sosiego.
Como si la espera, fuese un lugar de esos donde uno puede partir y quedarse.
Partir y quedarse para respirar el aire purificado de la costa y el azul mar, para golosear una quimera, del placer del silencio que obliga a estudiar la ciencia de la paciencia.
Abrazar la espera.
Porque sabes, que cuando estés caminando y llegues a la cima de la montaña, verás las luces parpadeando a los lejos.
Pequeños diamantes crudos, ya pulidos con empeño por el deseo.
Delicadeza y paciencia. Ahora brillantes, en el llano de la ciudad despierta, respirando palpitante. Respira.
La espera de esperar, hallar nuevamente la contraparte exquisita intelectual. La risa y la furia. La construcción del castillo de cemento reforzado con varilla y piedra, inamovible, imaginario. Espejo. Luz, redentor, volver.
Esperar la espera, como si fuese natural y borrase lo cotidiano, haciendo del espacio temporal un capítulo más.
Esperando la nueva página. Blank page. New book. Embracing calligraphy. Why not? Tan yo Gutenberg. ¡Gracias hierro! Suave calor que moldea el oro.
Adorando la nueva página llena.
Esperar a terminar de leer la hoja del libro, pasar a la otra página repleta de vida.
La otra página, que narra la otra historia fresca. La historia que construimos. La historicidad de recordar. La ciencia de guardar en la memoria lo que te constituye.
La ciencia de retener tus sueños, transformar la espera y oníricamente con el amanecer dorado, activar la acción concreta, precisa y determinada, para premiar y celebrar con júbilo las ideas viables y alocadas hechas realidad.
La ciencia de dejar ir y conscientemente, provocar la espera, para abrazar la idea de reinventar.
Recrear la idea de volver a ver nuevamente.
Durante el atardecer. En la mar abierta, templada y anaranjada del Caribe, muchos delfines.
Una escuela completa de delfines.
Más de una docena de delfines, el día de tu cumpleaños.