Pirulo viene de la Calle Linda

Voces Emergentes

altNota Editorial: El Post Antillano celebra al evento salsero más importante del hemisferio Latinoamericano y Caribeño, El Día Nacional de la Salsa de la emisora Z93fm, que por los pasados 31 años se ha realizado en San Juan, Puerto Rico. El Post Antillano le presta atención tanto a los invitados como a los no invitados. Las próximas semanas entrevistaremos a cuatro jóvenes y excelentes intérpretes del género musical salsero o de ritmos caribeños, que sugerimos también deberían estar en el Día Nacional de la Salsa.

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Entrevista al líder musical de la banda Pirulo y la Tribu, con motivo del éxito de su álbum y sobre su trayectoria. 

En un rincón del patio interior de un café en el Viejo San Juan aguardé por la llegada de quien sería mi entrevistado. Era una tarde tranquila, perfecta para una buena plática. Él se caracteriza por ser un rompedor e innovador, con gracia y autenticidad, así lo deja ver. No es partidario de los estereotipos, y es juzgado por los ojos mismos de la gente. ¿Quién diría que un hombre negro, alto, con trenzas que pasan de la espalda baja, tatuado y con una gorra de lado, en lugar de ser un reggaetonero o rastafari, es un salsero y una persona sentimental? Para callar el prejuicio cegado de la gente he aquí lo que de Francisco "Pirulo" Rosado Rosario, tal vez, muchos no sepan.

Fundador de "Pirulo y la Tribu", Rosado ha vivido momentos difíciles que, aunque para muchos serían una condenación al fracaso, para él han sido unas lecciones que la existencia ha tendido en su camino. Así, recogiendo cada una de esas buenas experiencias y sinsabores ha madurado personalmente y artísticamente. Como puertorriqueño reconoce que ha sido seducido por la salsa desde niño, y cómo no, viene de una familia musical y muy atada a la cultura. Su padre era un flautista nuyorican, pues fue parte de los auténticos inmigrantes del 40. Con una mirada y sonrisa nostálgica resaltó que así como muchas personas sacan de su tiempo diario para leer el periódico o sacar el perro a pasear, su padre tocaba la flauta inspirado en las vertientes del jazz religiosamente. De esa forma recuerda a su padre, que por los vicios contrajo sida y murió en 1996, al igual que su madre que quedó infectada. Esto marcó una etapa dolorosa, pero determinante en su vida.

Siempre tuvo presente la música porque además de su padre, su Tío Iván lo introdujo a la percusión a la edad de seis años con unas congas que siempre le fascinaron. Su madre notó la curiosidad e hizo las gestiones para que "Pirulo" entrara a la Escuela Libre de Música en Hato Rey en séptimo grado. Al tomar el examen por primera vez, no logra entrar, pero la insistencia de su madre logró que repitiera el examen y entrara con éxito a la escuela, donde estuvo desde séptimo grado hasta graduarse de escuela superior. Ahí pasó sus años felices y experimentó con instrumentos que iban desde el oboe hasta la guitarra, pero fue la percusión a lo que siempre se afanó y a lo que eventualmente se dedicó.

Su progreso fue notable, tan así que fue a estudiar a la prestigiosa universidad Berklee College of Music en Boston. Relató que el sueño americano no fue lo que esperaba, pero dentro de este marco de su historia comenzó a componer sus primeros números musicales estilo rumba en uno de esos largos viajes. Así desde el año 2000 confiesa que ha entrado a una dimensión de espiritualidad, muy distinta a lo convencional. Pirulo ya despuntaba como un compositor, músico y cantante de gran potencial.

En el año 2002 viajó a Cuba, y dijo: "Me abrió la mente a otras realidades, a las que estaba bien ajeno, como humano y como puertorriqueño. Fue una experiencia mágica, espiritual y única en mi vida." Es en este periodo, muy experimental, en el que comienza a componer para rapear. También en Cuba tuvo la oportunidad de escuchar a Tego Calderón, cuyas letras musicales le hicieron sentirse muy identificado como si "hablara por mí", puntualizó. Tego marcó su carrera, al punto de ciabogar su vida, y cruzar el charco nuevamente para regresar a Puerto Rico, pues entendió que "en lugar de estar como un perro detrás de una salchicha en los Estados Unidos, tengo que regresar a mi patria porque hay mucho qué hacer... Y quien lo haya entendido a él (Tego), me entenderá a mí también."

Así comienza su proceso de evolución urbana, como productor, cantante, músico y compositor, con unas marcadas influencias del jazz, son cubano, salsa y rap, que le permitieron aportar al reggaeton, que defiende por ser algo nacido en la Isla. Dijo que "es inevitable no hablar del reggaeton en Puerto Rico, porque es algo nuestro y lo defiendo y respeto mucho."

Sin embargo su inclinación a la salsa pudo más que cualquier otra cosa, y subrayó que el advenimiento de su primera hija hace tres años fue el evento cumbre de su vida, pues ya pensaba que no tendría hijos y como huérfano tenía ese deseo incumplido. Al nacer Sábara Iré dijo: "Si tengo mi hija, ya me gané 200 Grammys, maté la liga". Esto le motivó a trabajar desde una nueva perspectiva y se fortaleció al nacer su segunda hija, Iyansa Iré, pues por mucho tiempo se dedicó a la tarea "detrás de las cortinas" para muchos artistas como Iris Chacón, Yolandita Monge, Tego Calderón, entre otros.

Su nueva etapa le dejó ver que ya era su momento. Lo de soñador afloró, la industria cambió y tras una saturación en la música, según él, la salsa tenía que volver a la palestra, pues "no hay que ser salsero para saber quién es Héctor Lavoe, Ismael Rivera o Rubén Blades." Señaló también que aunque disfrutemos de otros géneros y eventos musicales rockeros o de música electrónica, que está muy en boga, no se puede abandonar, ni ignorar lo nuestro. "La salsa no es moda, ya es parte de la sociedad." Mencionó que Puerto Rico sufrió un lapso en el género salsero y dice que se atascó en la generación del 70 y 80, que sin perderle el respeto a Raphy Leavitt y La Selecta, El Gran Combo, Héctor Lavoe y otros, "la mejor manera de honrarlos es seguir con la salsa". Pirulo utilizó una singular analogía: la salsa como un bebé que ya es hombre. "No nos puede dar miedo ver que el bebé creció... la gente ha estado viendo la foto del bebé por años y años, pero hay que dejarles saber que ya creció", dijo el líder de "la tribu" quien insistió en que hay que atender con premura el género porque es necesario atemperarse para competir con otros géneros modernos y atractivos.

Al hablar de su proyecto musical, "la tribu" es la mejor manera de llamarle a su gente, pues están con él y son su tribu los que lo han apoyado y acompañado. Como tema recurrente en sus letras está esa gente de la calle, pero la calle buena, sin la connotación pesada y negativa que hoy muchos le atribuyen. Para Pirulo, "la calle tiene a todos los trabajadores y trabajadoras" porque no sería posible progresar sin ellos ahí. Al ser enfático en lo positivo de la calle se le hizo un nudo en la garganta, pues vivió y aprendió mucho de ella y se considera un hombre de pueblo.

Conversamos sobre su álbum "Calle Linda" que sobre todo "es una reafirmación personal y colectiva" de todo lo que ha vivido como muchos otros. Este álbum que rompe con los esquemas tradicionales de la salsa con su deseo de aportar positivamente al género fue reconocido como uno de los mejores 20 discos del año 2013 por la Fundación Nacional de Música Popular, que engloba a todos los artistas que lanzaron sus proyectos al mercado durante el año pasado. El artista también nos reveló que realizó un documental sobre el álbum y su making-of que estará disponible para la venta en formato DVD tan pronto como en marzo de este año.

Demás está decir lo feliz que se encuentra, pero enfatiza que tiene los pies bien puestos en la tierra y está sumamente agradecido por el apoyo del público, así como de la vida misma que lo ha ido encaminando y educando. Sin duda alguna, Pirulo y la tribu seguirá dando de qué hablar en este 2014, ya que comenzó a sonar en radio nacional y cuenta con el ánimo y carisma que un verdadero artista debe tener. Pirulo es calle, pero sobre todo sentimiento.