Divergent: fin a las castas y también a las facciones… seamos libres

Cine caribe

Dirvegent (Dir. Neil Burger, EE. UU., 2014) es un filme basado en la obra de la novelista norteamericana Veronica Roth, quien a su vez es la guionista de la película. Se trata de una película de ciencia ficción, allá en el futuro donde todo es diferente, y transita en la ciudad postapocalíptica de Chicago. Es el futuro, donde para evitar las guerras nos han clasificado en facciones, a los poquitos que quedamos. Como toda buena película que pregona el futuro, los que se salvaron del gran apocalipsis fueron fundamentalmente los blancos. Nada de boricuas ni negros en Chicago. Salvo uno que otro negro, el resto son blancos y caucásicos. Aquí yace siempre el problema de cuando intentamos contar el futuro, de forma naive o soáve, y se nos olvidan las complejidades de la vida.

Dividido el mundo en varias facciones, la que controla la fuerza es la de Odasía; luego están los filántropos y los que ejercen la gobernanza que son los abnegados; y finalmente están los inteligentes, que se la pasan investigando, pero sin la audiencia saber de qué investigan, llamados los eruditos. Hay otras dos facciones, los pacíficos y los cariñosos, pero esos no tienen mucho vuelo en la película. Finalmente si usted no es clasificado la pierde, se le da estatus de sin-facción. Los sin-facción son los deambulantes de hoy en día, que comen basura, nadie los protege, salvo los abnegados, y más que nada, nadie los da por existentes.

Ante este cuadro, Tris (Shailene Woodley), hija de abnegados, decide en su día de iniciación convertirse en osadía. Su hermano Caleb (Ansel Ergot) también renuncia a su familia y se hace erudito. El resto de la película es el proceso de domesticación que experimenta Tris en el grupo de osadía, que los convierten en guerreros. Dicho esto, hay un truco: Tris descubre que no tiene clasificación pues es parte de los divergentes, es decir, persona que son todas las facciones a la vez.

Así las cosas, Tris se entera de que los eruditos, haciendo uso de los de osadía, intentan darle un golpe de Estado a los abnegados e implantar un tipo de dictadura y genocidio. ¡Los dos procesos a la vez! Terrible película. Terrible futuro. Pero los divergentes son, a fin de cuentas, libertarios y anárquicos.

En fin, Tris se alía con Cuatro (Theo James), el segundo al mando en los del grupo de osadía, quien es el hijo de Marcus, líder de las facciones y miembro de los abnegados. Así las cosas inician un proceso de rebelión contra los eruditos y desactivando a los osados, quienes iniciaron el exterminio bajo el comando de los eruditos. En fin, una buena idea que Hollywood la convirtió en otra cosa.

Dicho esto, la película tiene un final abiertamente confuso. ¿La razón? La obra de Verónica Roth es una triología, y tanto la segunda como la tercera parte ya están en proceso. La próxima parte de la saga, Insurgent, estará lista para el 2015.

Pues nada, buena para un fin de semana en la tradición judeo-cristiana de la paz y la reconciliación. Si no tiene nada que hacer véala. Dicho lo anterior, la película se sostiene, buenos actores jóvenes, y más que nada mucha emoción y sed por la justicia (la que sea, pero la justicia). Lo dejo a su discreción.