Estos son los primeros rayitos de sol tomados desde mi balcón esta mañana como a las 7:30 am. Llevo semanas tratando de capturar un amanecer puro y las nubes no me lo permiten. Es el invierno veraneado de mi Puerto Rico que hace que nos despertemos más tarde y que muchas personas asocien las celebraciones navideñas con un estado anímico particular y algunos hasta se depriman. El resto del año es diferente, el sol nos despierta y somos más productivos. Esto me lleva a preguntarme, ¿será que hay un cierto determinismo lumínico que afecta el ánimo de las personas?
Caribe imaginado
Gallo Mojado
Siempre que me llega ese olor a pluma de gallo mojado;
avanzo por las callejuelas de Arecibo
y me acerco a mi tío gallero, a mi primo construido de madera y espuelas.
Por ahí se acomoda Raco, mi padre, el hijo del suicida,
el militar de ojos celestes.
Recapacito junto a los transeúntes
y vuelvo a ser el pobre diablo de mi barrio.
El pilón de abuela
Vivíamos en una casa de madera grande, que se impregnaba de un rico olor a habichuelas guisadas, cada vez que mi abuela las preparaba. Su ritual consistía en dejarlas en agua la noche anterior, para que se ablandaran. Luego, Mamy Naty, iba al patio a recoger culantro, chincha, orégano fresco, ajíes dulces que, junto a los ajos y cebolla, machacaba en el pilón de madera, que tanto había usado. El sofrito para los puertorriqueños es parte de su tradición gastronómica. No podemos imaginar una comida sin el sofrito y sus aromas.
Quiere irse con la nube
No hay agarre bajo sus pies
…como partícula por el aire
levita,
¿será por la falta de soga humana de abrazos
que no se encuentran en el Zoom
Un poema triste
A Esteban Charpentier
Ya
he pisado el umbral de la tristeza
(evoco todo lo vivido)
Ya
dialogo con el cuervo, lo elemental
aquello con un algo de belleza
audaz y gatuna que rectifica el labio de un saludo.
Las Torres Gemelas
Hoy, 11 de septiembre de 2021, confieso que llueve a cántaros, con rayos y centellas. En la montaña, el día amaneció oscuro y triste, quizás recordando que hace veinte años, miles de personas inocentes murieron por la ineptitud de los líderes de un imperio, que se ha autoproclamado el salvador del planeta.
Me acordé de ti
Me acordé de ti
después de los turbios alfileres del alcohol.
Pensé que podía domesticar tu recuerdo.
Hice una artimaña azul con el espacio de la memoria y resultó que ya no te habito.
Razones de Navidad
Celebro que nace un niño* que vino a dar un mensaje de amor a un pueblo duro de corazón, de doctrinas y corto en misericordia. Yo no soy religiosa. Trato, intento, me aliento en lo que fueron las enseñanzas de Jesucristo para el trato de la mujer, la niñez y los milagros de sanación, entre muchos otros: