(San Juan, 1:00 p.m.) El juicio contra la representante Mariana Nogales Molinelli, quedó suspendido en el día de ayer, por espacio de siete días. La juez que atiende el caso, la Juez Rodríguez, determinó suspender los procesos hasta que las partes se expresen sobre la solicitud de la defensa de Nogales de que la jueza se inhiba del caso por haber estado vinculada a una fase anterior del caso, y estar influenciada. Ahora bien, separando el grano de la paja, los aspectos técnicos del caso de Mariana Nogales, se habrán de dilucidar en función de las garantías legales y de debido proceso de ley. Dicho, esto, eso es un caso legal. Pero, lo que todo indica que está en juego, es un caso orquestado por el Partido Nuevo Progresista (PNP) no solo contra Mariana Nogales, sino contra el partido Movimiento Victoria Ciudadana. De esta forma lo que se está ventilado en realidad es como eliminar a este partido, en aras de que le sea más cómodo al PNP ganar las elecciones del 2024. Por lo tanto, lo que pase en el proceso legal contra Mariana Nogales, es su destino. No obstante, la voluntad del PNP es continuar debilitando por los procesos legales, a todos los partidos políticos que le drenen votos en las próximas elecciones. El rol de Gregorio Matías y Tomás Rivera Schatz en el caso contra Nogales, no es una casualidad. Es un proceso sistemático, de destrucción de la oposición. Ante este cuadro, la respuesta no debe reducirse a defender adecuadamente a la representante Nogales Molinelli. La respuesta social y política debe concentrarse en neutralizar y debilitar al PNP. Pensemos.
