Entre la pobre administración del PNP [en la UPR] y la apuesta a una estadidad que no llega [no hay ambiente en Congreso para impulsar un plebiscito] ¿Momento para el verano del 2023?

Política

(San Juan, 1:00 p.m.) Si uno escuché diariamente al licenciado Leo Diaz en su programa de Nación Z, la Nacional, uno pensaría que alucina o que alguien le ha hecho un guion que no corresponde a los tiempos reales del país.  Leo Díaz habla que lo mejor de la vinculación con Washington, son los “chavitos” que recibimos y que no recibe ni Haiti ni República Dominicana.  Literal, así habla Leo Díaz.  Puede uno pensar que se trata de un proceso de alucinación provocada.

Lo cierto es que ya Puerto Rico recibe mucho dinero federal. Pero como acaba de suceder con la Universidad de Puerto Rico, se reciben y no saben que hacer con los mismos.  Por lo tanto, de forma insólita, el Recinto de Rio Piedras de la universidad acaba de devolver una partida de $6 millones de dólares para construir un albergue para animales de uso de laboratorio, porque no pueden cumplir con los términos de fecha que exige el donativo.  ¿En serio? Los chinos, los cubanos y los dominicanos habrían puesto tres  turnos de trabajadores y trabajadoras para terminar la construcción en un mes. En Puerto Rico devolvemos el dinero, sin aparente costo político alguno.

Mientras en Washington, legisladores y cabilderos boricuas siguen perdidos en la luna de babel, pues cabildean por la estadidad sin ningún apoyo de los congresistas de turno. Sean republicanos o demócratas, ambos sectores reclaman que no hay momento para impulsar un plebiscito.  Por lo tanto, seguimos perdiendo tiempo, en particular el gobernador de tuno, Pedro Pierluisi y el jefe de los cabilderos estadistas, Ricardo Rosselló.  Pero nadie dice nada, y ellos siguen allá perdiendo tiempo.

Es momento de continuar los proceso sociales conducentes a perpetuar nuestro verano del 2023, como sinónimo de lucha.  Es momento de pensar y de luchar por sacar del poder político a estos personajes del PNP, que hablan como si estuvieran alucinando y cuyos comentarios no tienen nada que ver con la vida real que estamos padeciendo o viviendo.  La independencia sería una opción para demostrarle a Leo Díaz que vivir con dignidad y con un país planificado, es mejor que vivir pidiendo fondos públicos que luego ni saben utilizar. Pensemos.