Movimiento Cooperativo Solar en Puerto Rico [enfoque en la Energía Sostenible y el Empoderamiento Comunitario]

Economia Solidaria

(San Juan, 9:00 a.m.) Ante los problemas energéticos del país, nos preguntamos cómo el Movimiento Cooperativista está colaborando a buscarle soluciones al problema que tiene a mucha gente molesta. Se supone que el objetivo del país es llegar al 100% de energía renovable para el 2050.

Primero definamos que son las **cooperativas energéticas** estas desempeñan un papel crucial en la integración exitosa de la **energía solar** en la infraestructura de íred existente. Aquí están algunos de los beneficios de la **energía solar cooperativa**:

**Sostenibilidad ambiental**: Las bajas emisiones de carbono hacen que la energía solar sea una alternativa sustentable a los combustibles fósiles¹

**Generación local**: Las cooperativas energéticas contribuyen a la generación de energía local, lo que fortalece la resiliencia de la comunidad.

**Flexibilidad de la red**: Al invertir en sistemas de almacenamiento de baterías, las cooperativas aseguran la flexibilidad y estabilidad de la red eléctrica².

**Desarrollo económico**: Los sistemas solares comunitarios proporcionan beneficios económicos a través de la inversión y la creación de empleo.

El Movimiento Cooperativo Solar en Puerto Rico (MCSP) está surgiendo como una fuerza poderosa para la transformación energética y el desarrollo comunitario en la isla. Arraigado en los principios de la cooperación y la propiedad democrática, este movimiento reúne a cooperativas, organizaciones sin fines de lucro y ciudadanos comprometidos con la construcción de un futuro energético más sostenible y equitativo.

Este movimiento está avalado por la Ley Núm. 258, de 14 de diciembre de 2018, permite la creación de cooperativas de energía en Puerto Rico. Estas cooperativas buscan satisfacer las necesidades energéticas de sus socios y comunidades mediante sistemas de generación y distribución eléctrica. Impulsando la resiliencia y la autosuficiencia Energética.

 

Motivados por la necesidad de mayor resiliencia y autosuficiencia energética tras los huracanes devastadores del 2017, las comunidades puertorriqueñas se han volcado hacia la energía solar como una solución viable. El MCSP ha desempeñado un papel fundamental en la facilitación de este cambio, proporcionando apoyo técnico, educativo y financiero a las iniciativas de energía solar a nivel comunitario.Un modelo basado en la cooperación y la propiedad comunitaria.

Un aspecto distintivo del MCSP es su enfoque en la propiedad y gestión comunitaria de los proyectos de energía solar. Las cooperativas, estructuradas como entidades democráticas propiedad de sus miembros, ofrecen un modelo ideal para garantizar la transparencia, la rendición de cuentas y la participación activa de la comunidad en la toma de decisiones.

Beneficios amplios para las comunidades y el medio Ambiente.

La adopción de energía solar por parte de las comunidades de Puerto Rico a través del MCSP está generando una amplia gama de beneficios. Reducción de la dependencia de combustibles fósiles costosos e importados: La energía solar disminuye la dependencia de la isla de combustibles fósiles contaminantes, lo que contribuye a la seguridad energética y reduce el impacto ambiental.Creación de empleos locales: La instalación y el mantenimiento de sistemas de energía solar generan oportunidades de empleo en las comunidades.Empoderamiento comunitario: Los residentes adquieren un mayor control sobre su futuro energético y participan activamente en la construcción de una economía local más sostenible. Protección del medio ambiente: La reducción de la quema de combustibles fósiles mitiga las emisiones de gases de efecto invernadero y contribuye a la lucha contra el cambio climático.

 El MCSP en Puerto Rico está demostrando ser un modelo replicable para la transición hacia un futuro energético sostenible y equitativo en otras regiones. Su enfoque en la propiedad y gestión comunitaria, junto con los beneficios económicos y ambientales que ofrece, brinda una hoja de ruta inspiradora para otras comunidades que buscan tomar el control de su futuro energético.

Veamos algunos ejemplos de cooperativas energéticas-.

 1.La Cooperativa Hidroeléctrica de la Montaña es la primera cooperativa de energía eléctrica en Puerto Rico. La Cooperativa Hidroeléctrica de la Montaña se organiza con el propósito de proveer acceso a energía costo efectiva y resiliente de fuentes renovables para sus dueños-socios en las comunidades y los comercios en los municipios de Adjuntas, Jayuya, Lares, Maricao y Utuado. Los esfuerzos de la Cooperativa Hidroeléctrica de la Montaña van dirigidos a fortalecer las comunidades en la Cordillera Central de manera que sus residentes no vuelvan a pasar los retos, riesgos y vicisitudes a su salud y economía por la falta de energía eléctrica fiable y resiliente. Para lograrlo, la Cooperativa Hidroeléctrica de la Montaña provee energía costo efectiva y resiliente de fuentes renovables a través de sus tres proyectos principales.

  2.La **Cooperativa de Energía de San Salvador**, conocida como **Pirucho Coop**, es un proyecto comunitario en Caguas, Puerto Rico, que se dedica a proveer energía renovable al barrio San Salvador¹. ¹. Es notable por ser la primera cooperativa de energía renovable certificada en la región.

Este proyecto surgió como respuesta a la experiencia vivida por la comunidad de San Salvador tras el huracán María, que dejó al barrio sin energía eléctrica durante ocho meses. La cooperativa ha logrado un gran avance en autogestión y empoderamiento comunitario, agregando diez casas adicionales a la comunidad solar, que inicialmente estaba compuesta de ocho residencias.

Los sistemas de energía renovable de Pirucho Coop están compuestos de paneles solares, baterías, un inversor, un interruptor aislador y un contador. La meta final es alcanzar una comunidad solar de 450 residencias, de las 730 que componen el sector.

El mantenimiento de los sistemas está a cargo de SunSol LLC, y para completar su proyecto, la cooperativa busca apoyo del sector cooperativista e inversionistas privados². La **Fundación Comunitaria de Puerto Rico** (FCPR) ha sido un apoyo clave, junto con otros inversionistas filantrópicos y sociales, tanto locales como internacionales.

3.La **Cooperativa de Energía La Margarita** en Salinas, Puerto Rico, fue fundada por la **Asociación de Residentes de La Margarita, Inc. (ARLM)**¹ Este proyecto comunitario de energía verde ha sido reconocido por su enfoque innovador y eficaz en la solución de desafíos energéticos locales, como la contaminación y el envejecimiento de la infraestructura de la red¹

 

La cooperativa ha ganado la primera fase del premio **SOLVE IT**, patrocinado por el Departamento de Energía de los Estados Unidos y el Programa American Made, lo que representa un premio de **$80,000**. . El proyecto, denominado **Proyecto de Eficiencia Energética y Resiliencia de La Margarita**, busca mejorar la eficiencia energética, la confiabilidad y la asequibilidad para los residentes de la comunidad¹. La ARLM ha demostrado una amplia experiencia trabajando con la comunidad de La Margarita y un historial de proyectos exitosos basados en la comunidad, lo que contribuyó a su selección como uno de los equipos ganadores del premio.Además, la cooperativa se ha certificado como una cooperativa de energía solar para sus residentes, lo que les permite ser dueños de su propia energía²³.

Este esfuerzo es parte de un movimiento más amplio en Puerto Rico hacia la autogestión y el empoderamiento comunitario, inspirado por el logro de otras comunidades que se han convertido en solares en la isla. La Margarita busca convertirse en una comunidad resiliente y sostenible a través de soluciones energéticas avanzadas¹.

Son pequeños esfuerzos, pero son valiosos. Tomemos ejemplos de estas comunidades para liberarnos de la energía fósil. En resumen, las cooperativas de energía renovable en Puerto Rico están contribuyendo al uso sostenible de recursos y a la resiliencia comunitaria.