El relato de "Celestina Cordero Molina, una maestra de vocación” escrito por Rosario Méndez Panedas, publicado en “Invisibilizadas e innombradas. Cuentos de mujeres puertorriqueñas negras” (2022), nos sumerge en la vida de una valiente educadora afrodescendiente que desafió las normas de su época para dedicarse a la enseñanza y abrir una escuela para niñas en San Juan. A través de la historia de Celestina Cordero Molina (1787-1862) Méndez Panedas vislumbra la importancia de aplicar un enfoque interseccional que considere la interacción entre género y raza en el ámbito educativo, para concienciar sobre la necesidad de incluir y rescatar figuras históricamente borradas de la historia oficial por su raza y género.
Nacida en España, Rosario es una lingüista e hispanista que se reveló como escritora con su obra “Maestra Celestina” (2017). Este cuento le valió una mención de honor en la categoría de Literatura para Niños del PEN de Puerto Rico Internacional 2018. Rosario se graduó en Filología Hispánica en la Universidad Complutense de Madrid (B.A.) y en Literatura Hispanoamericana en la Universidad de Syracuse en Nueva York (Ph.D.). En la actualidad, trabaja como docente e investigadora en la Universidad Interamericana de Puerto Rico, en el Recinto de San Germán.
Celestina, nacida en San Juan, Puerto Rico, se convirtió en una de las primeras mujeres negras de la isla en obtener la licencia de maestra. Fue hermana de también educador Rafael Cordero Molina (1790-1868). Su lucha por la educación y la inclusión se ve marcada por su identidad de género y racial, en un contexto en el que las mujeres y las personas negras eran marginadas y privadas de derechos básicos, como el acceso a la educación. La narrativa nos revela cómo Celestina, a pesar de las adversidades y la discriminación, logró establecer una escuela en su hogar y dedicar su vida a enseñar a niñas y niños a leer y escribir.
La historia de Celestina resalta la importancia de considerar la intersección entre género y raza en el proceso educativo. Su experiencia como mujer negra en un contexto de opresión racial y de género evidencia la necesidad de abordar las desigualdades y las injusticias desde una perspectiva interseccional que reconozca la multiplicidad de identidades y la complejidad de las experiencias de discriminación. La interseccionalidad nos invita a comprender cómo se entrelazan y se potencian las formas de discriminación y marginalización que enfrentan las personas que pertenecen a múltiples grupos minoritarios.
En el relato de Celestina, Rosario destaca su lucha por obtener el reconocimiento oficial de su escuela, a pesar de las barreras impuestas por el gobierno y la sociedad de la época. Su persistencia y determinación para lograr el nombramiento oficial como maestra en propiedad reflejan la resistencia de una mujer afrodescendiente que desafía las normas establecidas y se abre camino en un mundo dominado por la exclusión y la discriminación.
La figura de Celestina, como maestra y como líder comunitaria, nos recuerda la importancia de visibilizar y valorar las contribuciones de las mujeres afrodescendientes en la historia y la educación de Puerto Rico. Su dedicación a la enseñanza y su compromiso con la inclusión y la igualdad de oportunidades para todas las niñas, independientemente de su origen o color de piel, nos inspira a seguir su ejemplo y a promover un enfoque interseccional en la educación, que reconozca las múltiples dimensiones de la identidad y la diversidad cultural.
En conclusión, el relato de Rosario sobre la gesta educativa de Celestina Cordero Molina nos invita a reflexionar sobre la importancia de aplicar un enfoque interseccional que valore la interacción entre género y raza en el ámbito educativo. A través de su historia de vida, se evidencia la necesidad de rescatar y visibilizar las voces silenciadas de las mujeres afrodescendientes en la historia de Puerto Rico, para construir una narrativa más inclusiva y diversa que refleje la verdadera riqueza de la sociedad puertorriqueña. Celestina, con su valentía y su compromiso, se convierte en un faro de inspiración y en un ejemplo de resistencia frente a la opresión y la exclusión, recordándonos la importancia de la educación como herramienta de transformación y empoderamiento en la lucha por la justicia y la igualdad.