La reforma contributiva de Puerto Rico trae cambios significativos: va a eximir a más del 80 por ciento de las personas que radican planillas de someterlas, y eliminaría el controvertible Impuesto sobre Ventas y Servicios (IVU). Aunque los detalles finales de esta reforma todavía están en etapas de discusión, ayer funcionarios públicos, incluyendo al gobernador Alejandro García Padilla, estaban tratándola públicamente. La reforma estará en pie con efecto retroactivo para el 2016, año de elecciones generales, si la Legislatura lo permite.
De salida, lo que se desprende de los detalles discutidos ayer es una estructura para levantar más fondos para el fisco. El IVU sería sustituido por el Impuesto de Valor Añadido (IVA) que se cobra en la cadena de distribución de bienes. Comienza con un impuesto sobre la mercancía al llegar a los muelles, después otro impuesto al mayorista y otro final al detallista que vendería los bienes al público (o los elaboraría en el caso de una industria). Aún no se sabe certeramente cuál será la cantidad a cobrar del IVA, pero se dice que podría ser un total (incluyendo las tres etapas) de un 12 a 14 por ciento. Este impuesto también le toca a los servicios profesionales, pero con ciertas exenciones tales como servicios financieros y rentas. También estarían exentas las exportaciones.
De acuerdo a Melba Acosta, la presidenta del Banco Gubernamental de Fomento, y hasta hace una semana secretaria de Hacienda, todavía resta examinar la reforma con las organizaciones de alcaldes de Puerto Rico. Dijo que ya se había discutido la reforma con organizaciones profesionales como la Asociación de Industriales, la Cámara de Comercio y el Centro Unido de Detallistas. El proyecto lleva varios meses fraguándose.
El Gobernador y su secretario de Gobernación, Víctor Suárez, tildaron la medida como una de justicia social, ya que aproximadamente un 82 por ciento de las personas que ahora radican planillas no tendría que hacerlo bajo esta reforma. Básicamente, el individuo que gana $35,000 o menos o un matrimonio que gana conjuntamente $70,000 o menos estarían exentos de rendir planillas.
El Gobernador recalcó que con la reforma se busca promover más la producción e inversión. Desde que se implantó el IVU ha habido problemas con su captación. Año tras año, el Gobierno ha fracasado en estimar correctamente la cantidad a recibir del recaudo del IVU. Son varias las razones, siendo una de las principales que muchos comerciantes no lo cobran o no reportan su captación al Departamento de Hacienda.
No se sabe qué pasará con unos bonos de Puerto Rico, conocidos como los bonos Coffina, cuyo base de pago es la captación del IVU.
Varios economistas han dicho, a través de los meses, que el sistema del IVA es una manera más efectiva de aunar recaudos que el IVU, ya que el IVA se impone en las etapas de distribución. La reforma eliminaría también la Patente Nacional, un tributo a las empresas impuesto por el Gobierno de García Padilla que ha traído grandes quejas por ser presuntamente confiscatorio. Su efecto ante los comerciantes e industriales, dicen sus detractores, es prácticamente eliminar la cantidad de dinero disponible para inversión.
“Lo que pasa es que los cambios (anteriores como el IVU) no han producido el recaudo que se esperaba, especialmente con las personas que operan en la economía subterranea”, sentenció Kermit Lucena, presidente del Colegio de Contadores Públicos Autorizados de Puerto Rico. “Bajo el sistema del IVA, que se usa mayormente en Latinoamérica y Europa, cada persona en la cadena de distribución tendría derecho a un crédito tributario”.
Otro detalle de la reforma que se analizó es que las aproximadamente 835,000 personas que no rendirían planilla someterían un formulario con datos básicos, incluyendo su salario. Es muy probable que los precios en las tiendas sean más altos de lo que son ahora. Aquellas personas que llenen los formularios y que, de acuerdo a sus ingresos, se lo merezcan, recibirían un reintegro para ayudarlos con los efectos del IVA. Este sería, por ejemplo, el caso de personas que viven solo de cheques de Seguro Social.
No está completamente claro cuánto recaudaría el fisco bajo el nuevo sistema. Pero el secretario de Gobernación, Víctor Suárez, dijo que el plan ampliaría la base contributiva.
La reforma, cuando se convierta en proyecto de ley, se discutirá en la sesión legislativa que comienza en enero. Cuantas enmiendas sufra en la Legislatura es asunto de pitonisas. Ya veremos si la medida estará lista para la firma del Gobernador para marzo de 2015, como ha dicho el mismo Primer Ejecutivo.
Crédito foto: Images Money, www.flickr.com, bajo licencia de Creative Commons (https://creativecommons.org/licenses/by/2.0/)