El PIP explica: ¿Por qué sería Puerto Rico un país más democrático bajo la independencia? (Serie 3)

Economia Solidaria

El colonialismo, por definición, es antidemocrático. Bajo el régimen colonial aplican innumerables leyes aprobadas por un congreso y un presidente extranjeros, lo cual constituye una negación de la democracia. El ejemplo más dramático de esto lo hemos visto en el contexto de Vieques. Durante más de sesenta años, los Estados Unidos usurparon las tierras de Vieques y sometieron a la población  de la Isla Nena a crasas violaciones a sus derechos humanos, atentando contra la tranquilidad, la salud, la vida y el derecho a prosperar económicamente y vivir en paz, todo ello contra la voluntad del pueblo viequense y del pueblo de Puerto Rico.

Miles de personas sufrieron cárcel por reclamar mediante la desobediencia civil el derecho a la paz. Eso no es democracia; es la negación de la democracia. Es tiranía.

En la independencia todas las leyes y reglamentos que nos rijan serán aprobados por el gobierno de Puerto Rico - un gobierno propio de verdad - y el poder de nuestros legisladores y ejecutivo no se diluirá en un congreso y un gobierno federal que representan intereses distintos a los nuestros, como sucedería en la estadidad.

Los países son democráticos o autoritarios como resultado de su desarrollo histórico y su cultura política. Países independientes como Barbados, Costa Rica, Jamaica, Nueva Zelanda, Francia, Trinidad-Tobago y Estados Unidos, entre muchos otros, han vivido durante muchos años, como Puerto Rico, con regímenes electorales respetuosos de las libertades individuales. Sus pueblos, como el nuestro, han aprendido las bondades de las luchas políticas cívicas y rechazarían profundamente cualquier intento por establecer un régimen autoritario o dictatorial. Otros países no han tenido la misma experiencia histórica, y sus pueblos aún no han tenido experiencias prolongadas en democracia.

En la actualidad, sin embargo, casi todos los países de nuestro hemisferio han vencido los regímenes dictatoriales de antes y disfrutan de un estado de derecho y de la democracia.

En la independencia, el Pueblo de Puerto Rico adoptará mediante una asamblea constituyente, y luego ratificará mediante referéndum, una constitución que establezca un gobierno plenamente democrático, cuyos poderes estén divididos en tres ramas de gobierno, y que habrá de proteger todos los derechos humanos. Dicho gobierno protegerá las libertades civiles y políticas tradicionales como la libertad de expresión, de culto, de prensa, de asociación, los derechos de los acusados, las prohibiciones de discrimen y otros. También asegurará los derechos económicos y sociales, como el derecho al trabajo, la educación, la salud, la vivienda y la alimentación, entre otros, que aseguran el bienestar económico y social del Pueblo.

El mayor grado de democracia se logra cuando los gobernados tienen en sus manos el poder de tomar las decisiones que afectan su vida como pueblo. Sólo en la independencia podremos alcanzar el máximo grado de democracia.