Encuesta en EE. UU. muestra que una mayoría favorece que indocumentados se queden en el País

Economia Solidaria

No es ningún secreto que la mayor parte de los inmigrantes en Estados Unidos ilegalmente son hispanos y que llegan a través de la frontera con México. Entre estos están muchos centroamericanos que cruzan dos fronteras para llegar a la que se canta la tierra de inmigrantes y de la Estatua de la Libertad. El que ha ido con alguna regularidad a un estado de la unión norteamericana sabe que estos inmigrantes llenan espacios de trabajo que los norteamericanos no quieren.

Aunque el asunto de inmigración es de primordial preocupación entre los votantes norteamericanos, una encuesta de Pew Research Center, uno de los servicios de estadísticas más prestigiosos de Estados Unidos, indica que un 72 por ciento de los norteamericanos creen que a aquellos trabajadores hispanos que son indocumentados se les debe dar una oportunidad para permanecer en la nación legalmente.

Entre aquellos encuestados, 42 por ciento cree que los indocumentados se les debe dar la oportunidad de solicitar la ciudadanía norteamericana, mientras que 26 por ciento piensa que solo deben tener los famosos “green cards”, como se les conoce a los permisos de trabajo en Estados Unidos.

Todo esto suena muy bien, pero los resultados de esta encuesta tienen sus matices. Para empezar, hubo una caída de seis por ciento por sobre el año pasado de norteamericanos que piensan que estos inmigrantes fortalecen al País. Alrededor de un 51 por ciento cree que los indocumentados merecen ser considerados para estatus legal por su talento y porque trabajan duro. Más de una tercera parte de los encuestados, la mayor parte militantes del conservador Partido Republicano, cree que a los indocumentados no se les debe ofrecer una vía para legalizar su presencia, ya que esto sería premiar conducta impropia. Entre las personas que se identifican como republicanos, un 63 por ciento creen que estos inmigrantes representan una carga para la nación.

Los encuestados que no favorecen que se le debe brindar una vía legal a los indocumentados para normalizar su estatus piensan que le quitan los trabajos a los norteamericanos y que son una carga indebida a los servicios de salud y otros servicios públicos.

El asunto de la inmigración de indocumentados, la mayor parte latinos, toma importancia mientras más se acercan las elecciones presidenciales de 2016. Irónicamente, dos de los precandidatos republicanos son hijos de hispanos. Los dos, Ted Cruz de Texas y Marco Rubio de Florida, tienen un posición muy reservada en cuanto dejarle el camino libre a los inmigrantes ilegales a normalizar su estatus.

Cruz, de padres cubanos, nació en Canadá. Parecería que cree que la inmigración a Estados Unidos es problemática para él, cuando proviene del sur.

 Crédito foto: Robert Claypool, www.flickr.com, bajo licencia de Creative Commons (https://creativecommons.org/licenses/by/2.0/)