Los desastres naturales, como en el caso de las sequías, van aumentando por efecto del cambio climático, causando graves efectos económicos y sociales. Cada vez que se presentan las sequías, ocurren numerosos fenómenos naturales cuyos efectos son negativos para la sociedad.
Las sequías son un evento meteorológico caracterizado por una extensa baja en las precipitaciones promedio de un lugar en particular. Para que ocurran las mismas deben coincidir varios factores meteorológicos en algunos lugares, aunque estos se localicen muy lejanos. Una intensa sequía extrema está ocurriendo en la región del Caribe, América Central y otras partes del mundo. En la región climatológica del Caribe, se reporta una sequía que se localiza desde el sur de Cuba, Jamaica, el norte de Haití, República Dominicana y la región de Ponce, en la Isla de Puerto Rico. En esta Isla, la sequía se ha extendido por toda la mitad este.
El Caribe como región geográfica se encuentra localizado al este de las grandes masas continentales. También, los países de esta región, por haber sido colonias de varios imperios, tienen diferencias culturales y lingüísticas, lo que fomenta el que una mayoría de los mismos no se comunican entre sí o su interconexión es mínima. Queda excluido aquí el sector del turismo, pero está limitado por las condiciones económicas individuales.
Entre los factores que producen la sequía está el fenómeno de El Niño que ocurre en el Pacífico Sur y que se trata de un calentamiento que ocurre en sus aguas en algunos años. Este calentamiento, movido por la corriente de Humbolt, produce grandes lluvias que afectan el lado oeste del continente americano y sequías al lado este del mismo. Allí donde se producen las lluvias, estas suelen causar inundaciones. Por el contrario, donde se producen extensas sequías, sus efectos pueden ser catastróficos. Se crea una escasez de agua, incluyendo el agua potable para consumo humano, graves daños a la agricultura y a la ganadería y a la producción de energía hidroeléctrica. También se registra un considerable aumento en los incendios forestales y los pastizales.
La sequía en la región del Caribe está afectando a las Antillas Mayores: Cuba, Jamaica, República Dominicana, Haití y Puerto Rico. También está ocurriendo al norte de Venezuela, norte de Colombia, noreste de Brasil y el rosario de islas que componen las Antillas Menores. En Cuba, la misma está presente en Mayaqué, Matanza, Santiago, Sancti Spiritus, Guantánamo, Granma, Las Tunas y Holguín. Se ha calificado esta sequía como seria y perjudicial a la salud. El Gobierno ha tomado medidas que permitan ahorrar el agua. Entre estas medidas están informar a la población sobre la sequía y requerirle el ahorro de este líquido. En algunas regiones ya se ha implantado el racionamiento del agua potable y el mejoramiento de la infraestructura.
En República Dominicana, la sequía es la máxima ocurrida en los últimos 20 años. El nivel de los embalses continúa bajando cada día más. Los ríos que abastecen las presas han bajado su caudal en forma muy peligrosa. Las temperaturas alcanzan altos niveles y la insolación solar ha aumentado. Esta sequía ha afectado la región del Cibao y el norte del país. Como medida de precaución se ha limitado el suplido de agua potable. En Jamaica, la sequía se extiende desde 2014. En el 2015 continuó por efecto de la aparición de El Niño. Las parroquias que están más afectadas son Manchester, Clarendon, Saint Thomas y Saint Mary. La sequía de este año 2015 continúa a la del 2014, y es posible que continúe hasta el 2016. Las causas de esta prolongada estación seca han provocado pérdidas millonarias en nuestros países que son comunes a toda la región.
Puerto Rico está sufriendo una de las más prolongada sequías de su historia. Esta sequía amenaza en convertirse en la peor. Como en la Isla no hay lagos naturales, se procedió a crear embalses para distribuir agua potable a toda la Isla, incluyendo las islas de Vieques y Culebra. Estos embalses están sufriendo una enorme y consecutiva baja en sus niveles y ya presentaban una gran sedimentación por causa de la erosión.
La disposición de agua en Puerto Rico está compuesta por lagunas, múltiples ríos y quebradas, además de la disponibilidad de ríos y acuíferos subterráneos. Con esta agua disponible se pueden sostener las necesidades humanas, agrícolas e industriales de toda la Isla. Esto no es posible en tiempos de sequía por factores humanos, de infraestructura y pérdida del 58 por ciento del agua potable. La sequía se está enfrentando con una prolongada reducción de agua potable para los hogares, el comercio y la industria. Ya no se puede extraer más aguas de los acuíferos subterráneos porque los mismos podrían sufrir una instrucción salina, dañándose para siempre. Esta sequía ha conllevado cuantiosas pérdidas económicas a la agricultura, la ganadería, el comercio y la industria y a la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados, ente gubernamental que produce y distribuye el agua potable en Puerto Rico.
La sequía de este año 2015 se localiza principalmente hacia la mitad este de la Isla. Consideramos que Puerto Rico padece de un mal manejo de este recurso y que el País no está preparado para un evento de esta naturaleza. Las medidas de racionamiento impuestas por el Gobierno no alcanzan a mitigar esta sequía y, en ocasiones, estas son punitivas como en el caso de las multas por un mal uso del agua.
Crédito foto: Vinoth Chandar, www.flickr.com, bajo licencia de Creative Commons (https://creativecommons.org/licenses/by/2.0/)