El polvo del Sahara

Economia Solidaria

altLas emisiones a la atmósfera producidas por el cambio climático influyen en la contaminación del aire y tienen efectos negativos en la salud. El polvo sahariano es producto de las tormentas de arena que ocurren en ese desierto. Durante el día, la temperatura del desierto aumenta notablemente. Esto tiene como resultado que el polvo se levante y ascienda a muchos kilómetros en la atmósfera y luego sea transportado al Atlántico por los vientos alisios. En el Sahara se produce la mayor parte del polvo mineral que se mueve a la atmósfera. Este polvo está compuesto de óxidos y carbonatos, que son los compuestos que mayoritariamente constituyen la corteza terrestre. El mismo polvo carga numerosos componentes biológicos y minerales. Entre ellos se destacan bacterias, hongos, virus, componentes fecales, ácaros, microorganismos, fungicidas, patógenos y derivados de petróleo.

Las micropartículas de polvo ascienden sobre la brisa marina por la diferencia de temperaturas y son transportadas por los vientos alisios hacia el oeste. Algunas de estas micropartículas llegan hasta Islas Canarias España, Portugal e Inglaterra. Otras se precipitan al mar causando daño a los corales. La mayoría se dirige al Caribe y América. En la Amazonía, el polvo del Sahara ayuda a fertilizar el suelo porque contiene una carga de nutrientes formada por nitratos, manganeso, calcio, hierro y bióxido de carbono.

Al moverse en la atmósfera cruzando el Océano Atlántico, las micropartículas forman una nube de polvo que afecta grandemente las lluvias al reducir el tamaño de las gotas en la nube de agua. También inhiben la formación de las nubes altas que producen lluvias, contribuyendo de este modo a la existencia de grandes sequías en territorios americanos. La nube de polvo sahariano es causante de una subida en la temperatura, la reducción de las lluvias y causan efectos negativos en las ondas, las vaguadas y la formación de ciclones.

A partir de la década de los años setenta, por el efecto causado en el aumento en las temperaturas, estas nubes de polvo se observan con más frecuencia. Esta situación se debe a los efectos del cambio climático. Las tormentas en el Sahara son más frecuentes y los vientos alisios se han debilitado. Como consecuencia, la nube de polvo sahariano está presente por más tiempo. Los efectos de este polvo afectan tanto el clima como el tiempo. Por su dispersión, la nube de polvo sahariano limita la irradiación solar. También afectan negativamente las lluvias, influyendo de esta forma a las sequías veraniegas del Caribe.

Los científicos hacen uso de múltiples instrumentos para estudiar el polvo atmosférico. El uso de satélites ha permitido un gran avance en estos estudios. Mediante los satélites y calculando la velocidad de traslación de estas nubes de polvo, los meteorólogos pueden pronosticar su llegada a un sitio en particular.

El valle de Bodelé es el lugar de donde más polvo sale del Sahara. Aunque es muy pequeño en comparación con ese desierto, su posición entre dos crestas de montañas, cuando este polvo se eleva, sale por un embudo y se acelera el flujo de aire.

Este polvo es muy peligroso para la salud humana, especialmente por el efecto causado en el sistema respiratorio. El polvo sahariano es de partículas muy finas que se alojan en los pulmones y en las mucosas del tracto respiratorio. A muchas personas, este polvo les causa alergias, asma, laringitis e infecciones sobre la piel.

En el Caribe, la presencia del polvo del Sahara aumenta por el calor del verano. Las nubes de este polvo tardan en llegar al Caribe cerca de una semana. Las mismas son más frecuentes en el Caribe Central. Estas nubes causan malos efectos en la calidad del aire y afectan los ecosistemas marítimos y terrestres.

Se ha descubierto que por la presencia de sus compuestos son el mayor fertilizante de la mayor selva del planeta, la Amazonía. Estos aportan nutrientes para el suelo como nitratos, calcio, magnesio y bióxido de carbono. La selva amazónica es conocida como el mayor “pulmón del planeta.”

Las nubes de polvo sahariano vienen acompañadas de microorganismos patógenos capaces de causar graves daños a la agricultura, microorganismos, animales, incluyendo a los seres humanos.

En Puerto Rico, la llegada del polvo del Sahara comienza en abril y dura hasta el mes de octubre. La máxima ocurrencia de estas nubes aparece durante los meses del verano, especialmente junio y julio. La llegada de este polvo tiene el efecto de aumentar la temperatura.


Crédito foto: cliff williams, www.flickr.com, bajo licencia de Creative Commons (https://creativecommons.org/licenses/by-sa/2.0/)