Boricuas por un nuevo país

Cartas de un(a) Antillano(a)
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"Los y las integrantes de la Organización Civil, Borikuas por un Nuevo País, por este medio comunican que se solidarizan con el Estado Nacional Soberano de Borinken y apoyan la propuesta de gobierno para la liberación del sistema colonial impuesto a esta Nación por los pasados 117 años por el gobierno de los Estados Unidos de Norteamérica", indicó la Dra. Maria Villeneuve en representación de esta Organización, Borikuas por un Nuevo País.

Según se expresó, como portavoz alterna de Borikuas por un Nuevo País, la única alternativa viable para la descolonización de la Isla la ofrece el ENSB y mencionó que, hasta el presente, el estatus de la Isla no ha dejado de ser un 'juego político' de los partidos políticos tradicionales en concertación con la Metrópoli Norteamericana que en nada beneficia a la Isla ni ha adelantado el Derecho de Libre Determinación por considerar el 'territorio' un mercado muy lucrativo a los intereses económicos y militares del gobierno Norteamericano.

Un ejemplo fehaciente, mencionó, es la deuda fiscal Multimillonaria que al presente se tiene con Bonístas, la trampa de 'Fondos Buitres', el Dumping (acaparamiento del mercado por productos extranjeros), Transnacionales, Mega-tiendas Norteamericanas que inundan y estrangula el desarrollo de la economía local. Todo un negocio lucrativo para el extranjero del Norte pero no para el pueblo Borikua, comentó.

Según la Dra. Villeneuve, se requiere un cambio en el discurso político y económico para salir de la situación colonial, del déficit económico y social por el que se atraviesa. En este aspecto indicó que, " ... La posición del ENSB se acoge al planteamiento en Derecho Internacional de que toda Nación/País Libre, Autónomo, Soberano e Independiente que es Invadido, Intervenido y Ocupado militarmente por otro País, que derroca a las autoridades que constituyen su gobierno y se impone por la fuerza, resulta ser un gobierno 'de facto' (de hecho), es ilegal. En nuestro caso, el gobierno Norteamericano en la isla de Boriken (llamada Puerto Rico) obliga a la obediencia por la fuerza militar, mediante mandatos y leyes que condicionan toda la actividad jurídica, económica y social reduciendo a esta Nación/País a un territorio/Colonia; acción que es ilegal independientemente del tiempo transcurrido".

Continua diciendo, "... resulta ser ilegal porque al invadir la Isla en 1898 no hubo consentimiento de la población, tampoco hubo consentimiento de la población cuando fue invadida y ocupada por España. De modo que, todo lo que de esa relación desigual se ha generado desde entonces hasta el presente siglo 21 son actuaciones ilegales, producto de la imposición, intimidación, manipulación y engaño". Nos asevera Villeneuve que, "... el Derecho Internacional que asiste a toda la población Borikua (Puerto Rico) es que somos Soberanos, así nos declaramos y la exigencia del ENSB es que el gobierno Norteamericano se retire de esta Isla Archipiélago Borinkana. No se trata de preguntar, solicitar permiso, ni siquiera rogar un Derecho que es inalterable e inalienable, que es dado porque el País, la Nación invadida siempre conserva su Soberanía, en esto consiste el discurso político del ENSB".

Añade la doctora que, el ENSB establece que dada la ilegalidad de la intervención Norteamericana en la Isla, "...No se tiene, ni podemos hacernos cargo de la actual deuda fiscal por ser ilegítima, extraconstitucional y contraída como resultado de las imposiciones 'de facto' de control establecidas por el gobierno interventor; así como todas las pérdidas económicas, muertes de miles de jóvenes, veteranos lisiados/afectados como resultado de guerras ajenas a nuestra Patria a las que les obligaron enfrentar, entre muchos otros actos que han atropellado y atropellan a nuestra gente. Por el contrario, la Metrópoli Norteamericana está obligada a compensar por daños y las pérdidas que ha provocado en los 117 años de ocupación e intervención ilegal en esta Patria Borinkana que fue convertida en una Colonia por los primeros usurpadores españoles que llamaron a capricho, primero San Juan Bautista y luego figuró como Puerto Rico y perpetuado por el gobierno Norteamericano. Señores, el discurso político no puede continuar en pedir y mendigar sino en exigir lo que por Derecho nos corresponde. Estos son los planteamientos que la Organización civil Borikuas por un Nuevo País apoya. De igual forma apoyamos las alternativas para el desarrollo de una economía local sostenible para esta Nación, que son viables y los detractores del sistema obstaculizan, aunque este tema habrá que presentarse con mas detenimiento", terminó diciendo Villeneuve.

En San Juan, Borinken

Crédito foto: karogers, www.pixabay.com, bajo licencia de dominio público