En el 2016: “Tengo el mono trepau”

Caribe Hoy

En nuestro calendario el nuevo año llego el primero de Enero, pero el nuevo año chino llegara para el 8 de febrero. En China cada año se identifica con un animal, éste 2016 le toca al Mono. En Puerto Rico “tengo el mono trepau”, es una frase popular, que decimos cuando estamos molestos, incómodos, o con dolores en los hombros, del estrés o la frustración. Este año que acaba de comenzar, es, el año del mono, que tal parece que lo vamos a tener “trepau”, empujándonos para que nos movamos. El 2016 es el año del Mono, el Mono de Fuego según el horóscopo chino. Es un año según los astrólogos, de ritmo rápido, de mucho movimiento, y donde se incrementa la comunicación y las soluciones a viejos problemas.

Parece que vamos a tener un año muy interesante. El mono como todos sabemos, es un animal que se mueve mucho, curiosea mucho, no se está quieto, parece incansable. Para los que prefieren dejarlo todo como está, sin cambiar nada, obviamente el año será muy difícil y les parecerá que los que se mueven están locos o parecen, monos. Para los que decidamos seguir el ritmo del mono, y aprovechar ese movimiento, tenemos la oportunidad, de dar un giro a nuestras vidas, individuales y colectivas.

Nada es inamovible en la naturaleza, la vida es, movimiento, lo que no se mueve, muere. Ésta es una realidad que podemos constatar en la naturaleza, en lo individual y en lo colectivo. Éste es, el año del cambio grande, vamos a asombrarnos de lo que somos capaces de hacer. Viejos hábitos que no nos ayudan, la inercia, la dejadez, el “déjalo para otro día”, el “yo no puedo hacer nada con eso”. Pensamientos caducos, relaciones tóxicas, estatus estancados y hasta cuentos que parecen verdades.

El mono, dicen, que tiene la habilidad de encontrar soluciones nuevas, inusitadas, diferentes, a problemas viejos. Ésta habilidad del Mono es extraordinaria, nos cae como, “anillo al dedo”. ¿Quién no tiene un problema viejo que no ha podido solucionar? Casi todos tenemos alguna espinita rondando año tras año y se queda clavada, para el próximo. Pues éste año, el mono, nos provee la oportunidad de encontrar una solución, a esa vieja situación.

Los puertorriqueños tenemos un problema que está tocando a nuestra puerta, desde varias generaciones, para una urgente solución. Quizás en el año del mono, podamos encontrar una solución inusual a un problema caduco, estancado, que nos impide levantar la cabeza psicológica y sentirnos seguros y orgullosos, por dentro.

Otra cosa que trae éste año del Mono es que habrá, según los expertos, mucha energía mental. Es decir, nuestras cabezas estarán prendidas. Supongamos que algunas pensando mucho y haciendo mucho. Otras como es característico, pensando mucho como el pensador de Rodin, y haciendo poco. Mucha energía mental en el ambiente, nos obliga a pensar antes de actuar, no sea que la marea nos lleve por donde no queremos. O que, actuemos de manera impulsiva, que en el caso personal, es terrible. En el del país, sería nefasto.

Es año de poner al día nuestro programa de mejoramiento personal. Los hábitos de carácter no deseados, que no apartan de los demás y nos convierte en antipáticos. Ese gimnasio que pagamos y fuimos 3 días. La meditación que comenzamos y como no salió rápido, “mejor dejarlo para cuando esté tranquilo”. Ese mejoramiento en la dieta que ya sabemos que no, nos hace bien. Esa responsabilidad, a la que llevamos años, huyéndole como “el diablo a la cruz”. En fin todos conocemos la lista.

Como decíamos éste año del Mono pinta bien para movernos a nuevas avenidas de pensamiento, palabra y obra. Sería bueno aprovecharlo, Dios sabrá cuándo regrese. ¡Feliz año del Mono de Fuego!

Crédito foto: Carlos ZGZ, www.flickr.com, bajo licencia de Creative Commons (https://creativecommons.org/publicdomain/zero/1.0/)