Puerto Ricans in Paris … o una lectura curiosa de la diáspora

Cine caribe

¿Qué significa ser puertorriqueño en Nueva York? Esta pregunta se la han hecho muchos, en el pasado como en el presente, y las contestaciones han sido diversas. Tal vez, el laureado poeta hoy fenecido Pedro Pietri, en su obra cumbre, Puerto Rican Obituary, intenta descifrar esta pregunta, cuando nos describe como los que morimos diariamente por lo que hacemos en la ciudad de los grandes edificios, Nueva York. En esa medida, Puerto Ricans in Paris (Dir. Ian Edelman, EE.UU., 2015), filme que se acaba de estrenar en la isla, es una curiosa sorpresa.

Se trata de la opera prima de Edelman, quien simplemente ha trabajo para televisión y algunos créditos para cine. Pero esta es su primera película. Lo cierto es que es una película en la cual Edelman junto a Neel Shah escribieron el guion, de dos policías de la ciudad de Nueva York, detectives, que son contratados para investigar un robo de un bolso de diseñadora en la ciudad de Paris, Francia. Los dos detectives lo son: Luis (Luis Guzmán) y Eddie (Edgar García). La película incorpora a otras actrices interesantes, como Rosie Pérez (Gloria) y a Rosario Dawson (Vanessa). La primera como la esposa de Eddie y hermana de Luis. La segunda como la novia de Luis.

El filme es ocurrente, pues intenta caminar sobre territorios ya conocidos de detectives de Nueva York visitando una ciudad europea. Este punto de la trama, es uno harto recorrido. Lo que lo hace distinto, es que sean boricuas los policías. Esto nada más hace que la sala del cine se llenara en la noche de ayer. La audiencia fue a ver a un comediante conocido, Luis Guzmán, en un filme con un título ocurrente.

La película no obstante es una ópera prima para Edelman, donde pese a contar con recursos para filmar parte en Nueva York, Paris, Francia, y en Praga, República Checa, la misma pierde detalles importantes del quehacer fílmico. En particular, la edición por momentos no fue buena, lo que dejó en el producto final más de un error. Por momentos el filme parece, en el sentido del humor y ocurrencias, a los filmes recientes de la industria cinematográfica dominicana, pese a que Fausto Mata no actuaba.

En fin, que nos alegra ver a Luis Guzmán, actor boricua de Nueva York, conocido por sus anuncios de televisión y apariciones oportunas en algunos filmes locales como Mal de amores (Dir. Carlos Ruiz y Marien Pérez, P.R., 2007) en un papel protagónico en un filme hecho en los EE.UU. No es una oportunidad que a menudo él tiene. No obstante, su actuación fue por momentos muy atinada, y por momentos, estereotipada y pobre.

Nada, que hay que verla, pues hay buenas ocurrencias de qué es ser boricua en Nueva York. La película, dirigida a toda la familia, se deja llevar y usted sale feliz.