De acuerdo al economista Hernández Pérez Verena, “con el tránsito del capitalismo a su fase monopolista la tendencia del capital a ampliar su territorio económico y aún su territorio en general, aumenta. La exportación de capitales, el reparto económico y territorial del mundo y los monopolios de diferentes países, se convirtieron en rasgos esenciales del sistema. Las trasnacionales, como se les conoce, son empresas que acumulan o reproducen capital en varios países. El poder de las empresas transnacionales, se ha acrecentado en los últimos veinticinco años, como resultado de la extensión del neoliberalismo. Este es el caso del conglomerado de compañías brasileñas Odebrecht, especializado en ingeniería, construcción, empresas químicas y petroquímicas. Este grupo de empresas tiene presencia en muchas partes del mundo. Se conocen como Odebrecht Construtora Ltda y fue fundada en Salvador Bahía, Brasil por Norberto Odebrecht.
El Grupo opera en Estados Unidos desde 1991, prestando servicios de ingeniería y construcción de carreteras, puentes, aeropuertos, puertos y metros. Actualmente tiene contratos en los estados de Florida, Texas y Luisiana. Odebrecht admitió al Departamento de Justicia de Estados Unidos haber sobornado funcionarios estatales en una docena de países incluyendo, Venezuela, Guatemala, Perú, Ecuador, Argentina, Panamá, Colombia, República Dominicana, Angola y México, así como en Brasil.
Obedrecht también pagó sobornos en Venezuela, México, Argentina, Colombia y Perú, según una investigación de Estados Unidos. Como consecuencia de estos pagos, la empresa obtuvo unos beneficios por valor de más de $1.400 millones de dólares.
De acuerdo a un documento judicial difundido por Estados Unidos, empezando en 2009, Odebrecht pagó aproximadamente US$349 millones en sobornos a partidos políticos, funcionarios extranjeros y sus representantes en Brasil.
En Panamá, las organizaciones civiles han recomendado investigar la corrupción vinculada a la constructora brasileña Norberto Odebrecht, que otorgó $59 millones en pago de sobornos a funcionarios panameños durante el periodo 2009-2014 para adjudicarse contratos de obras de infraestructura pública. La investigación se haría con el objetivo de recuperar los dineros del Estado y llevar la justicia a todos los implicados, de manera eficaz y oportuna.
En Argentina, Odebrecht pagó más de $35 millones de dólares a intermediarios para que llegaran a funcionarios argentinos relacionados con tres proyectos de infraestructura. Los sobornos le propiciaron beneficios por valor de $278 millones. Su proyecto de obra más emblemático en este país fue el soterramiento del ferrocarril Sarmiento, que une la ciudad de Buenos Aires con sus inmediaciones.
En el caso de Venezuela, los pagos fueron de $98 millones de dólares a varios intermediarios que tenían acceso directo a compañías públicas. El objetivo de Odebrecht era obtener información confidencial sobre proyectos y garantizarse concesiones.
En México, los pagos ascendieron de $10.5 millones de dólares, entre 2010 y 2014, generando beneficios de $39 millones de dólares.
La corporación Obedrecht ha pagado múltiples sobornos a funcionarios corruptos de alto nivel en muchos países. La misma está siendo investigada en la mayoría de ellos.
Este es sólo un ejemplo del daño que puede hacer la globalización.