¿Es el tenis-de-mesa el deporte [nacional] de Puerto Rico?

Crítica Deportiva
Typography
  • Smaller Small Medium Big Bigger
  • Default Helvetica Segoe Georgia Times

(San Juan, 1:00 p.m.) Tal vez no nos habíamos dado cuenta, pero el tenis de mesa se ha convertido hoy por hoy en el deporte nacional de Puerto Rico.  La pérdida de presencia escénica de la pelota, como se le llama al béisbol en la isla, fue sustituida desde 1970 por el baloncesto, y con un pequeño aunque sólido guiño por el voleibol.  Ahora bien, en los últimos años el tenis de mesa se ha convertido en el deporte de conversación en la isla.
Posiblemente todo se deba a la estelar Adriana Díaz, quien dentro de todos sus logros, y estar hoy en la posición 18 del ranking mundial de dicho deporte, la convierten en una atracción nacional.  Pero lo más interesante de Adriana, es que ha hecho de un deporte de fácil manejo productivo (es un deporte individual que requiere una inversión de equipo limitada), un tema de conversación nacional a partir de sus victorias y de la participación en primera instancia de su familia, incluyendo a su manejador, su padre Bladimir Díaz.  También está su hermana, Melany Díaz, quien creo su propia aura al logra una importante victoria en la competencia de equipo de tenis de mesa en Lima, Perú en el 2019. Menos aún, no podemos de dejar de mencionar al primo, Brian Afanador, quien también se ha destacado a nivel internacional.
Pero hoy vemos que lo que se inició con mucho tesón por parte de Bladimir Días, de forjar un club de tenis de mesa en el pueblo de la montaña de Utuado, hoy se ha se ha expandido a nuevos talentos. Vemos que una delegación de boricuas, Sub-18, participan hoy de entrenamientos en Suecia.  Este es el caso de los jóvenes Daniel González, Ángel Naranjo, Jabdiel Torres y Edmarie León, quienes entrenan en el norte de Europa bajo otros auspicios y mentorías.
En fin, que todo indica que hoy gozamos de la dicha de ser, a nivel global, reconocidos por un deporte que hasta hace poco era inusual en la isla, y se ha convertido en un proyecto de país. Sin lugar a duda, hay que darle merito a la familia Díaz de Utuado.  Adelante.