Las próximas elecciones en Puerto Rico son, posiblemente, las más interesantes en muchos años. Por primera vez desde la década de 1980, se presentan más de tres partidos políticos a la contienda electoral. Esto nos permite discernir de otra forma. Tendríamos la oportunidad en Puerto Rico de seleccionar entre seis partidos políticos para explorar quien nos debe gobernar a nivel estatal, municipal y legislativo. Lo que entra en juego es una gama de posibilidades, que dan un toque plural al país. Ni bueno ni malo, sino plural.
Ahora bien, ¿es esto suficiente, tener una diversidad de partidos? Es curioso, pero la democracia se nutre, en principios, de la diversidad. Diversidad de ideas, de posibilidades, de diferencias de vida, que permiten vivir de formas mucho más complejas. Ahora bien, lo que nadie dice es que tener diversidad de partidos garantice la diversidad de los partidos. Esto es lo más curioso, pues tenemos una situación por la cual nadie al día de hoy puede garantizar que los votos de todos los partidos políticos se cuenten de forma justa y adecuada en los colegios electorales que estarán abiertos el próximo 6 de noviembre de 2012.
En días reciente, el comisionado electoral del principal partido electoral de país, el incumbente en el gobierno, señaló que si la gente no se queda a contar sus votos, su partido no lo habrá de hacer. Es decir, se necesitan 9 mil funcionarios de colegio electoral para contar los votos de cada partido. No es igual que un funcionario cuente los votos de todos y les de el mismo valor. No. Lo que pasa es que si usted no cuenta sus votos, el otro funcionario no lo habrá de hacer.
Es algo terrible pero en las próximas elecciones en Puerto Rico tenemos que salir a votar por una diversidad de partidos. Luego tenemos que defender el conteo de votos, para que sea justo para todos y todas los que votamos y los que aspiramos a una vida más diversa y plural para Puerto Rico.