(San Juan, 12:00 p.m.) Las autoridades de Haití apresaron a uno de los empresarios más influyentes del sureste de ese país, a quien acusaron de poseer armas de guerra. Se trata de Joël Khawly, un importador de cemento que además controla gran parte del comercio de combustible en el sur profundo y tiene mucha influencia en el sector político haitiano. La información la ofreció el periódico haitiano Le Nouvelliste, citado por el impreso dominicano de circulación gratuita, Diario Libre, en su versión digital. El arresto se inició durante un operativo que se extendió por seis horas de allanamientos en su residencia, ubicada en el distrito de Jacmel, por sospecha de estar vinculado al narcotráfico. En un principio, en esa incursión domiciliaria las autoridades no hallaron estupefacientes, aunque sí dos armas de guerra, una T65 y una Uzi, agrega el citado medio. “Es director ejecutivo de la empresa Khamaco. No encontramos drogas sino dos armas de guerra”, confesó a Le Nouvelliste el juez de paz Fritz Palanquet. El reconocido empresario Joël Khawly “es haitiano por sangre y cultura”, detalla el medio online. El trasiego desde el exterior de poderosos armamentos hacia Haití ha sido una acción recurrente y cientos de esas utilidades están en manos de las pandillas que se dedican a asaltar, violar y secuestrar personas de distintas nacionalidades para luego pedir millonarias sumas de dinero por liberarlos. Se recuerda que el 18 de agosto del 2022 el periódico The Washington Post denunció que desde Estados Unidos ingresan a Haití lotes de armas de grueso calibre, información que quedó confirmada por autoridades federales que mostraron preocupación por el sustancial aumento de contrabandos de equipos y pertrechos militares desde la Florida hacia esa nación. El agente especial de la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional, Anthony Salisbury, dijo que el flujo de pertrechos hacia el país más pobre de occidente incrementa en cantidad y en el calibre, y como prueba mostró durante una conferencia de prensa rifles de francotirador calibre 50 confiscados a contrabandistas. Ese tipo de armamento, cuyo valor es de 60 mil dólares en el mercado negro de la Florida, puede alcanzar un blanco a 1,800 metros de distancia, por lo que el agente federal advirtió que “en manos equivocadas, estas armas son capaces de causar una destrucción incalculable”. The Washington Post alertó en un editorial que un contenedor con 18 armas de guerra y 15 mil municiones habría arribado a Haití enviado desde Estados Unidos a la Iglesia Episcopal, en cuyo documento de embarque se consignaba la carga como “bienes donados, útiles escolares y alimentos secos”. Según el medio estadounidense, en años anteriores las armas retenidas en contrabandos que pretendían arribar ese destino consistían mayormente en pistolas, y en cantidades menores, pero ahora la tendencia refleja un aumento en cuanto al número y al calibre, que incluyen también fusiles automáticos y ametralladoras.
