Solo me queda… Cultura Previous Article Se presentó el libro Sonó el Timbre, Cayey: de la azada a la máquina Next Article Raza y clase en la obra de Octavio Ianni Share This (San Juan, 10:00 a.m.) Solo me queda una luz y un organismo de recuerdos y castigos. La memoria está encaracolada; hecha un ovillo de avispas y esqueletos. Cumplo con mi computadora antigua; con mi vorágine de pan de azúcar y excrementos. Previous Article Se presentó el libro Sonó el Timbre, Cayey: de la azada a la máquina Next Article Raza y clase en la obra de Octavio Ianni