Es una franquicia que de ordinario no vería. Pero, cuando vi esta última entrega, todo cambió. Hace rato que no veía una película que me hiciera pensar tanto en ambientes multiculturales como esta. Por eso nada más creo que hay que verla. En particular, porque pienso que el mundo se construye a partir de experiencias como esta película nos lo plantea.
My fat greek wedding 3 (Dir. Nia Vardalos, EE.UU., 2023) es una interesante secuela a las dos producciones previas de esta franquicia, bajo el mismo nombre. Uno las va a ver, con tal de tener algo que conversar. No obstante, en esta ocasión, la película trabajó el tema de la cultura griega desde la multiculturalidad, lo cual lo hizo mucho más interesante.
Se murió el padre Toula (Nia Vardalos) y Nick ( Louis Mandulor). En fin, va toda la familia para Grecia a honrar la memoria del padre. Llevar las cenizas y llevar su libro de memorias vividas en los EE.UU. Lo primero para depositarlo en el árbol más viejo de la villa en la isla de origen, y lo segundo para entregárselo a sus mejores amigos de infancia.
Hasta aquí todo bien. Luego pasan cosas interesantes. Pues se encuentran con la madre de otro hermano, y luego con el hermano. Entonces se pone buena la película. A partir de ahí surge la comunidad los cariños y todo el mundo se quiere. Pero aparcen los ucranianos como los sirios, poblaciones migrantes, y cada cual comienza a vivir el sueño europeo de la integración.
En fin, que lo mejor de la película es el tratamiento a la diversidad. Sea de la comunidad LGBTQI+ o sea ucraniano, la película te integra. En esa medida es una gran apuesta, para toda la familia.
Sugiero verla, pues plantea un modelo de familia de futuro sin igual. Linda película.