Moscú- La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, aseguró hoy aquí que el principal desafío de su país está en la educación, al clausurar el II Foro bilateral de Negocios donde participaron unos 400 ejecutivos de esa nación y Rusia.
Logramos universalizar la enseñanza básica recientemente y ahora trabajamos para consolidar la calidad, explicó ante unos 300 empresarios rusos y cerca de 100 procedentes del gigante suramericano.
Al clausurar las jornadas de presentaciones en busca de una alianza tecnológica, la mandataria expresó orgullo de poder comentar que de conjunto con la Federación Nacional de Industriales, ese Estado suramericano destina los recursos necesarios al proyecto Ciencia sin Fronteras.
Este programa tiene el propósito de formar a 100 mil jóvenes brasileños en las mejores universidades del mundo, dijo durante su discurso en el hotel Ritz Carlton, a unos 500 metros del Kremlin.
La dignataria resaltó que dentro de la alianza que Brasilia y Moscú se proponen en el campo de la ciencia y la tecnología, Rusia puede desempeñar un papel esencial, con su rica tradición cultural, en la asimilación de algunos de esos educandos.
Indicó que uno de los objetivos de esta visita es evaluar qué universidades clasifican para insertarse en Ciencia sin Fronteras.
Elogió la centenaria tradición cinetífica rusa y añadió que a ello se suma su desarrollo tecnológico de punta en ramas de avanzada.
Rousseff se refirió a la crisis económica global que comenzó en 2008 por Estados Unidos y advirtió que los recortes y la falta de inversiones para el desarrollo no son la solución.
Evocó la experiencia latinoamericana a finales de la década de 1980 y la de 1990, cuando se aplicó sin éxito esa fórmula a diferencia de los tiempos actuales, cuando la situación es diferente. Comparó ese panorama con el de Europa, donde los efectos de la crisis se prolongan sin que se vislumbre una salida, a pesar de la política de reducción drástica de los presupuestos.
En relación con Rusia y su país, indicó que para ambos se abren buenas perspectivas en la construcción del futuro, en una alianza estratégica que fomente el comercio, la economía basada en la gestión del conocimiento, la innovación y los productos de valor agregado.
Tal espíritu también está reflejado en el mensaje que pronunció recientemente el presidente ruso, Vladimir Putin, ante la Asamblea Federal, concluyó la estadista.
Antes de clausurar el foro, la presidenta brasileña retó los menos 10 grados centígrados de temperatura y rindió tributo al pie de las Murallas del Kremlin a los caídos en la Gran Guerra Patria (1941-1945), al colocar una ofrenda floral en la Tumba del Soldado Desconocido.