La Habana, (pl) El Sistema Nacional de Salud cubano, caracterizado por su carácter estatal y social, accesibilidad y gratuidad, capacidad de respuesta y adecuación a situaciones de cada momento, han llevado a que la estrategia sanitaria del país alcance indicadores sin precedentes.
Una tasa de mortalidad infantil de 4,6 por cada mil nacidos vivos, mortalidad materna, 22,5 por cien mil nacidos vivos y la esperanza de vida al nacer de 77,9 años, un programa de inmunización que aglutina a 13 enfermedades, con la aplicación de 11 vacunas, ocho de ellas de producción nacional.
Eliminación de enfermedades inmunoprevenibles como la poliomielitis, difteria, tétanos, entre otros importantes logros.
El desarrollo de políticas de gran envergadura, el establecimiento de un modelo de medicina en la comunidad y los programas básicos del área de salud, orientados al control del riesgo; cambiaron el cuadro epidemiológico cubano, que enfrenta hoy nuevos retos, envejecimiento y cáncer.
La isla asume hoy el desafío de contar con un 18,3 por ciento de su población mayor de 60 años, y el incremento de los casos de cáncer, que hacen de esa enfermedad la primera causa de muerte en el país, por encima de las cardiovasculares.
Así lo refirió el doctor Roberto Morales Ojeda, ministro del sector en un encuentro sostenido con la prensa especializada, donde destacó también que el enfrentamiento a las enfermedades crónicas no trasmisibles y los brotes epidémicos son prioridades de esa cartera.
Indicó que se refuerzan los sistemas de control y vigilancia y se fortalecen los laboratorios de todo el país para detectar de manera oportuna cualquier situación epidemiológica que se desarrolle en la isla y la región.
Señaló además, que el ministerio mantiene el propósito de incrementar la calidad de los servicios y la satisfacción de la población, a partir de mejoras en la atención médica y la solución de los problemas administrativos y logísticos de las instituciones, así como la sostenibilidad y eficiencia del sistema.
Morales Ojeda se refirió a la importancia de continuar aplicando el método clínico, el cual ha contribuido a disminuir gastos innecesarios y reducir las indicaciones de medios diagnósticos, manteniendo los indicadores de salud.
Insistió en que aún se trabaja en rescatar los conceptos fundacionales de la medicina familiar. El Programa del médico y la enfermera de la familia es una concepción revolucionaria de la medicina, por su carácter preventivo, su papel social y sus posibilidades para cambiar los estilos de vida no saludables, dijo.
Informó que existe en la nación toda una variedad de pruebas para diagnóstico precoz de cáncer cervicouterino, colon, próstata, entre otros, desarrollados por el polo científico, a disposición del sistema de salud, y el ministerio se encuentra enfrascado en la adquisición de nuevas tecnologías.
Los resultados hasta el momento nos hacen optimistas porque con la existencia de más de 11 mil consultorios, se ha elevado la permanencia y estabilidad del médico y la enfermera de la familia en su comunidad, el número de atenciones realizadas a partir del perfeccionamiento del proceso de dispensarización, y se ha retomado el análisis de la situación de salud.
Explicó que se mantiene el proceso de reorganización y compactación de los servicios en las diferentes áreas sanitarias, también se aboga por la regionalización asistida, un concepto en que se debe profundizar.
En conversación con Prensa Latina, Morales Ojeda expresó que hay que trabajar más en esta definición, aún no entendida por todos los profesionales, que no siempre guían a la población para la realización de los estudios que le son indicados.
Proseguir los esfuerzos por mejorar todavía más los principales indicadores sanitarios, entre ellos, la mortalidad infantil y materna, son algunos de los objetivos del ministerio para 2013, afirmó Morales Ojeda, quien adelantó que en lo que va de año las cifras están por debajo de igual etapa precedente.
También resaltó la formación de recursos humanos en Cuba, profesionales de gran sensibilidad, humanismo y entrega, y con alto nivel científico, que tendrán que apropiarse de las más novedosas tecnologías existentes en el mundo.
Sobre la colaboración médica internacional el experto, destacó que se garantizan los servicios en diversas partes del mundo, se renuevan convenios y se asumen nuevos compromisos.
*Jefa de la redacción de Ciencia y Técnica de Prensa Latina.
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